23 lápidas prehispánicas halladas en México

23 lápidas halladas en México descubren mitos de la cultura prehispánica

Las piedras, de 550 años de antigüedad, están en pleno centro de la capital

Narran el nacimiento de Huitzilopochtli, dios mexica de la guerra

Imagen de una de las 23 lápidas, cedida por el Instituto Nacional de Antropología e Historia. /HÉCTOR MONTAÑO (EFE)

El centro de la bulliciosa capital de México ocultaba uno de los grandes secretos de la cultura prehispánica. Un grupo de arqueólogos ha descubierto frente al Templo Mayor azteca 23 lápidas de unos 550 años de antigüedad que muestran mitos de la cultura mexica como el nacimiento del dios de la guerra Huitzilopochtli y el origen de la Guerra Sagrada.

Las piedras grabadas, hechas de tezontle (piedra volcánica), y localizadas a finales de 2011 en la Plaza Manuel Gamio, representan serpientes, prisioneros, ornamentos y guerreros que aluden al origen de la antigua cultura mexica, según ha explicado en un comunicado el Instituto Nacional de Antropología e Historia de México (INAH).

El hallazgo ha tenido lugar durante los trabajos de supervisión arqueológica previos a la creación de un nuevo acceso al museo de Templo Mayor. Una vez terminados los trabajos de restauración y sondeo para determinar la existencia de alguna ofrenda bajo de las lápidas, se colocará un suelo de cristal para que los visitantes puedan admirar las 23 lápidas.

El Templo Mayor, edificado en lo que ahora es el Zócalo de la capital mexicana y áreas circundantes, fue el centro más importante de la vida religiosa de los mexica. Posiblemente, los grabados fueron orientados hacia lo que fue el centro de adoración de Huitzilopochtli, lo que presume que corresponden a la cuarta etapa de construcción del Templo Mayor (1440-1469), según el investigador Raúl Barrera, responsable del Programa de Arqueología Urbana del INAH.

Otra de las lápidas frente al Templo Mayor. / HÉCTOR MONTAÑO (EFE)

Los vestigios prehispánicos tienen gran valor arqueológico, ya que es la primera vez que se encuentran dentro de lo que era el recinto sagrado de la antigua Tenochtitlan y se pueden mostrar «a manera de documento iconográfico un discurso que narra ciertos mitos de esta antigua civilización», según el arqueólogo.

De acuerdo con el mito del nacimiento de Huitzilopochtli, la diosa de la tierra y la fertilidad, Coatlicue, quedó embarazada cuando una pluma entró en su vientre mientras barría. Molestos por ello, sus hijos, 400 guerreros surianos (en náhuatlcentzonhuitznahua) y la diosa de la Luna, Coyolxauhqui, decidieron ir a la montaña de Coatepec, donde vivía la embarazada, para matarla. “A su llegada al cerro Coatepec», explica el arqueólogo Barrera, Coyolxauhqui y los guerreros enfrentaron a Coatlicue y la decapitaron. En ese momento nació el dios de la guerra Huitzilopochtli, quien enfrentó a los guerreros y mató a su hermana, a la cual desmembró”. La leyenda sobre el origen de la Guerra Sagrada entre los mexicas, descrita en los códices Chimalpopoca y Boturini, establece que durante el recorrido que realizaron de Aztlán hacia el lago de Texcoco, en el Valle de México, donde edificarían su ciudad, bajaron del cielo los guerreros estelares del norte, llamados en náhuatl mimixcoas, que fueron enfrentados, derrotados y sacrificados por los tenochcas.

“Ambos mitos se relacionan con el concepto de una batalla estelar, en la cual el dios de la guerra y del Sol Huitzilopochtli, sale victorioso de la afrenta contra los 400 guerreros del sur y Coyolxauhqui, lo que dio origen a las estrellas (combatientes muertos) y a la Luna (al lanzar la cabeza de su hermana decapitada al cielo)”, ha señalado Raúl Barrera.

Las imágenes representan ocho serpientes con las fauces abiertas, un escudo de guerra o chimalli con figuras de caracoles y cuentas de piedra, y dardos en dirección a la parte inferior, y trazos que quizá simbolicen chorros de sangre, según han explicado Lorena Vázquez y Rocío Morales, arqueólogas involucradas en la investigación.

 

[fuente : El Pais de Madrid]

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Grabación de voz de José Martí

Novedades sobre grabación de voz de Martí

RANDY SABORIT MORA

LA HABANA, 3 de febrero (PL).— Mientras estudiosos cubanos consideran posible que José Martí haya grabado su voz en un cilindro fonográfico, el asesor de la Oficina del Programa Martiano, Jorge Lozano, asegura que el Apóstol dejó en aquel invento frases en español e inglés.

El Maestro habló en inglés y en español para aquel cilindro receptor, invención de Thomas Edison, y como muchas personas de la época, lo compró para tenerlo, afirmó Lozano en entrevista exclusiva a Prensa Latina, cuando esta semana Radio Miami publicó que un ingeniero cubano de sonido, residente en Nueva York, continúa la búsqueda tras 20 años de aquel artefacto.

«Después que murió en combate el 19 de mayo de 1895, el cilindro de propiedad del Héroe Nacional cubano lo recibió en la urbe neoyorquina su viuda Carmen Zayas Bazán, quien al retornar a Cuba lo trajo consigo, y se dice, que en un rapto de celos lo destruyó al arrojarlo al piso», relató el también filósofo.

Según el experto, en el centenario del natalicio de Martí la institución encargada de archivar los documentos y valores de Edison se dirigió al gobierno cubano de entonces para vender la grabación con la voz del Apóstol, pero el Ministerio de Comunicaciones del régimen de Fulgencio Batista (1952-1959) respondió que no accedía a la compra.

Lozano precisó que ese testimonio oral se lo escuchó a Gonzalo de Quesada y Miranda, y a Gonzalo de Quesada y Michelsen, respectivos hijo y nieto de Gonzalo de Quesada y Aróstegui, el albacea de aquel prócer.

El especialista no descartó la posibilidad de encontrar la grabación de la voz del Delegado del Partido Revolucionario Cubano en los archivos de Edison, pues los Quesada le contaron que Carmen Zayas rompió una copia de la grabación, pero no el original.

Por su parte el distinguido historiador Pedro Pablo Rodríguez, investigador al frente de la Edición Crítica de las Obras Completas de José Martí, señaló que desde hace muchos años se habla que el poeta grabó su voz, pero que se sepa no existe ninguna evidencia que lo pruebe.

Entretanto la profesora Nuria Nuiry, quien durante generaciones ha hablado de la vida y obra de Martí en la Universidad de La Habana, manifestó a Prensa Latina que hay un rumor insistente sobre ese tema hace varios años.

«La posibilidad existe, pero no se tiene ningún dato concreto acerca de eso. Sin embargo, no pierdo las esperanzas de escuchar la voz del Apóstol. Ojalá», remarcó Nuiry.

Cuando aún es una incógnita la existencia de las palabras grabadas por el patriota, el escritor argentino Carlos Aldao evocó en un artículo su experiencia delante de un fonógrafo en la Nueva York de 1893, en la cual habitaba también Martí.

Aldao describe que fue al departamento destinado a los fonógrafos, donde vio la historia del maravilloso aparato en las distintas formas que sucesivamente había adoptado.

«En un disco receptor dejé este autólogo: Gloria a Edison que con su genio ha conseguido aprisionar a la palabra viva. Su nombre vivirá en los tiempos para honor de su pueblo y de su raza», rememoró en su testimonio recogido en las páginas del Anuario 13 del Centro de Estudios Martianos de La Habana, de 1990.

Conocer esta anécdota acrecienta la probabilidad de que el Apóstol, tan seguidor de los adelantos tecnológicos, haya dejado para la historia su autólogo.

De su lado, la Premio Nobel de Literatura Gabriela Mistral confesó el 28 de julio de 1934 que una de sus pérdidas en este mundo fue no haber escuchado el habla de Martí.

[Fuente : Granma >>]

My take: Reclaiming Jesus’ sense of humor

English: This is a map of first century Iudaea...

Editor’s note: James Martin, SJ, is a Jesuit priest, culture editor of America magazine and author of «Between Heaven and Mirth: Why Joy, Humor, and Laughter are at the Heart of the Spiritual Life,» from which this article is adapted.

By James Martin, Special to CNN

Here’s a serious question about levity: The Bible clearly paints a picture of Jesus of Nazareth as a clever guy, but he never seems to laugh, much less crack a smile. Did Jesus really have no sense of humor; didn’t he ever laugh?

Well, one difficulty with finding humor in the New Testament is that what was seen as funny to those living in Jesus’ time may not seem funny to us.

For someone in first-century Palestine, the premise (or “setup” as a comic would say) was probably more amusing than the punch line. «The parables were amusing in their exaggeration or hyperbole,» Amy-Jill Levine, a New Testament scholar at Vanderbilt University, said in an interview. “The idea that a mustard seed would have sprouted into a big bush that birds would build their nests in would be humorous.»

People in Jesus’ day would probably have laughed at many of his intentionally funny illustrations: for example, the idea that someone would have lit a lamp and put it under a basket, or that a person would have built a house on sand or that a father would give a child stones instead of bread.

But contemporary Christians may be missing the humor that Jesus intended and that his audience understood.

Father Daniel J. Harrington, SJ, professor of New Testament at Boston College, agrees. «Humor is very culture bound,» he told me. «The Gospels have a lot of controversy stories and honor-shame situations. I suspect that the early readers found these stories hilarious, whereas we in a very different social setting miss the point entirely.»

Let’s repeat that: hilarious.

Or maybe we just know the stories too well. Too many Gospel stories have become stale, like overly repeated jokes. «The words seem to us like old coins,» wrote Elton Trueblood, a 20th-century Quaker scholar, «in which the edges have been worn smooth and the engravings have become almost indistinguishable.»

In his book «The Humor of Christ,» Trueblood recounts the tale of his 4-year-old son hearing the Gospel story of seeing the speck of dust in your neighbor’s eye and ignoring the log in your own and laughing uproariously. His son recognized the humor that someone else, who might have heard the story dozens of times, might miss.

There are other indications in the Gospels that Jesus of Nazareth had a lively sense of humor. In the Gospel of Matthew, Jesus is castigated for not being as serious as John the Baptist. «The Son of Man came eating and drinking,» Jesus said, «and they say, ‘Look, a glutton and a drunkard.’ ” In other words, the Gospels record criticism of Jesus for being too high-spirited.

«Jesus and his disciples,» said the Rev. Richard J. Clifford, SJ, a biblical scholar at Boston College, «are criticized for living it up!»

After his time on Earth, some of this playfulness may have been downplayed by the Gospel writers, who, scholars say, may have felt pressured by the standards of their day to present a more serious Jesus.

«There were probably things that were compressed and shortened, and some of the humor may have been leached out,» Clifford said. «But I see Jesus as a witty fellow, someone who is serious without being grim. When the disciples argue among themselves, Jesus brings wit into the discussion.»

Jesus also embraces others with a sense of humor. In the beginning of the Gospel of John comes the remarkable story of Nathanael, who has been told by his friends that the Messiah is from Nazareth. Nathanael responds, «Can anything good come out of Nazareth?»

This is an obvious joke about how backwards the town was; Nazareth was seen as a backwater with only a few hundred people.

And what did Jesus say in response? Does he castigate Nathanael for mocking his hometown?

Jesus says nothing of the sort! Nathanael’s humor seems to delight him.

«Here is truly an Israelite in whom there is no deceit,» Jesus said. In other words, here’s someone I can trust.

Nathanael then became one of the apostles. Jesus’ welcoming of Nathanael into his inner circle may be the clearest indication that Jesus had a sense of humor.

Besides, what kind of a person has zero sense of humor? I asked Eileen Russell, a clinical psychologist based in New York who specializes in the role of resilience, how she would describe the psychological makeup of a person without a sense of humor.

“A person without a sense of humor would lead to that person having significant social problems,” she said. “He would most likely have difficulty making social connections, because he wouldn’t be able to read signals from other people, and would be missing cues.”

That’s the opposite of what we know about Jesus from the Gospels. Yet that’s just the kind of one-sided image that many Christians have of Jesus. It shows up in Christian books, sermons and in artwork. It influences the way that Christians think about Jesus, and therefore influences their lives as Christians.

If part of being human includes having a sense of humor, and if Jesus was “fully human,” as Christians believe, he must have had a fully developed sense of humor. Indeed, his sense of humor may be one unexamined reason for his ability to draw so many disciples around him with ease.

It’s time to set aside the notion that Jesus was a humorless, grim-faced, dour, unsmiling prude. Let’s begin to recover his humor and, in the process, his humanity.

Bukowski y Apple

La máquina que agarró a Bukowski por los huevos

Por: Fernando García | 20 de enero de 2012

Bukowski_con_Mac

Apple inventó la autoedición. Con la ayuda de PageMaker, un programa de maquetación, y una impresora de alta resolución, Apple comenzó a entrar a partir de 1985 en las imprentas y en las salas de maquetación de periódicos y revistas de todo el mundo. La autoedición llegó a los particulares a partir de 1990, cuando apareció el Macintosh IIsi, un ordenador con 1 mega de memoria que se podía ampliar hasta 65. Costaba 2.999 dólares.

El escritor Charles Bukowski compró un Mac IIsi el 18 de enero de 1991. Sufrió algunas penurias informáticas: “Ahora mismo esta máquina me tiene agarrado por los huevos”, escribió el 12 de septiembre de 1991 antes de llevar el ordenador al taller. Cuando dos editores le escribieron insinuando que “el ordenador no era bueno para el espíritu”, Bukowski anotó en el diario: “Bueno, muy pocas cosas lo son. Pero yo estoy a favor la comodidad; si puedo escribir el doble y la calidad es la misma, entonces prefiero el ordenador”.  A pesar de sus frecuentes malos momentos informáticos, donde llegó a perder un capítulo entero de una novela, Bukowski se convirtió en uno de los primeros apóstoles de Apple y  sus Macintosh.

Veintidós años después del IIsi, Apple lanza iBooks Author, una herramienta gratuita para hacer con el Mac libros digitales que luego se puedan leer en el iPad. El programa dispone de unas plantillas que ayudan a crear un libro con más facilidad. Una vez terminado, el resultado se puede comprobar en el iPad. Después, basta con enviar el “iBook” a la tienda de libros de Apple (por ahora sólo en EE UU) para descargar gratis o para venderlo.

No obstante, habrá que leer la letra pequeña del EULA de iBooks, que es la licencia de software por la cual el autor o titular de los derechos autoriza a utilizarlo al usuario si cumple una serie de condiciones. Dan Winneman ha señalado en su blog que la licencia de usuario de iBooks Author no permite vender los libros realizados con la aplicación en cualquier librería digital porque obliga a comercializarlos a través de la tienda de Apple. Si el libro se ofrece de forma gratuita, el escritor o editor puede distribuirlo gratuitamente donde desee.

Tal vez Bukowski se enganchara al iBooks’ como hizo con el Mac. Al menos en los días en que sospechaba que el editor creía que su obra no era literaria. “Si él no la quiere se la coloco a otro. Se venderá tan bien como cualquier otra cosa que yo haya escrito, y no porque sea mejor, sino porque es tan buena, y mis locos lectores la están esperando”.

 

[fuente : El Pais >>]

El capitán Horacio

por Fernando Butazzoni 
No pretendo con estas líneas realizar un estudio (que a estas alturas, por otra parte, me parece más que necesario) sobre el incesante trabajo cultural de Horacio Verzi durante las últimas cuatro décadas. Se trata más bien de esbozar algunas imágenes de quien ha sido mi amigo, mi hermano, y con quien he discutido y reflexionado a lo largo de los años y en distintas partes del mundo acerca de ideas, ocurrencias, dislates, infamias propias y ajenas.
Lo primero que debo señalar es la variedad, vastedad y complejidad de la obra de Horacio Verzi. Para ello, es necesario delimitar lo que se entiende por “obra”. Más allá de algunas definiciones canónicas habituales en nuestro panorama teórico actual ─definiciones ya perimidas en mi opinión─, esa obra está constituida por novelas, cuentos, relatos, artículos, críticas y recensiones, clases, charlas y conferencias, ediciones y publicaciones, ausencias y presencias. Se trata de un aparataje complejo, poco visible y de gran solidez. Tan poco visible que su accionar no ha sido suficientemente reconocido en el Uruguay ─como sí lo ha sido en otras partes del mundo.
Horacio es un artista. Definición que desborda los límites preconcebidos de las diversas disciplinas para integrar en un todo su manera de entender la cultura y la sociedad. Verzi ha ejercido el criterio (ha hecho crítica) con implacable certeza, y lo novedoso de su aporte consiste en las formas múltiples de hacerlo.
Graffiti fue una instancia de enorme brillantez, digamos que un punto de inflexión. Tanto la revista
de ese nombre como el sello editorial que la acompañaba, marcaron una época en el panorama cultural uruguayo. Se trató de una enorme apertura, tanto gráfica como conceptual, literaria y social. La revista Graffiti incorporó nombres, temas y disciplinas que estaban ausentes desde hacía décadas en el obnubilado panorama local. Ese aire provinciano que a todos nos sofocaba a la salida de la dictadura, allá por fines de los años 80 del siglo pasado, era un estanque lleno de bacterias proclives a la putrefacción de los corpus cultuales. Graffitirenovó ese aire, le metió oxígeno, algo de azufre, ozono, vaya a saber qué.
No diré mucho de la  editorial, porque me comprenden las generales de la ley: yo publiqué la primera edición de “Príncipe de la muerte” en 1993, gracias a la generosidad de Horacio. Era una empresa arriesgada
, pues se trataba de un ladrillo de 400 páginas sobre un cuchillero del siglo XIX. Sin embargo, con buen tino Horacio supo cómo hacerlo sin empeñar el futuro de la empresa. También hubo una edición de “El tigre y la nieve”, cuando aún no se habían desenterrado a los muertos de La Perla, en Córdoba, lo que habla también de un cierto sentido histórico que recorre toda la obra de Horacio: está presente en sus libros (en sus novelas, en sus relatos), está presente en sus análisis críticos y está presente en su labor editorial. Sólo así puede entenderse la avispada y temprana publicación (tapa negra, ilustración helénica) de “El ojo dyndimenio”, de Daniel Chavarría, quizá una de las cumbres narrativas del siglo XX.
Al mismo tiempo que dirigía la revista y la editorial, Horacio escribía con la misma pasión y honestidad de siempre. Ya había obtenido reconocimiento internacional, en especial con su novela “El mismo invisible pecho del cielo”, pero él consideraba (y lo considera hoy, tantos años después) que la escritura es una forma de existir: explorar el mundo, el alma humana, las relaciones sociales, las pasiones. De modo que no se daba tregua. Esos pr
ocesos de escritura, dolorosos de por sí, tienen en Horacio Verzi una palabra que los distingue y que rara vez es aplicada a la literatura: decencia. Puedo decir con toda propiedad que es un escritor decente, es decir alguien que considera la dignidad de lo que escribe y la dignidad de lo que será leído (autor y lector) como parte sustancial de su tarea. Esta decencia también lo ha construido como lector de saberes enciclopédicos.
Esta noción (mía) de decencia en el trabajo literario, que a todas luces se contrapone con las doctrinas imperantes respecto al asunto, está relacionada estrechamente con la noción (de Horacio) respecto a la necesaria problematización de la vida cultural en general y de la escritura en particular. En efecto, Verzi considera que el mercado, las modas, los caprichos y los negocios han convertido el ámbito de la literatura en general en una simplificación absurda y ─agrego yo─ dañosa.
Durante años (en especial durante los años 90 del siglo XX, en el apogeo del llamado “neoliberalismo”) se establecieron algunas consignas que terminaron por convertirse en dogmas culturales: la linealidad, la economía verbal, la comprensión directa, la vulgaridad. Esto ocurrió en la literatura ─y muy especialmente en la narrativa hispanoamericana─, pero también en la dramaturgia, en el cine, en la pintura, en la crítica. Hubo un divorcio entre la elaboración compleja del arte y sus discursos, por una parte, y el mercado y los mercaderes por el o
tro. La poesía virtualmente desapareció de las librerías, las vanguardias plásticas quedaron acorraladas en las muestras under, el teatro buscó la taquilla con el ingrediente facilongo de los artistas de la televisión… Y así. O sea, hubo un proceso de desproblematización de la cultura, que nos llevó como sociedad al borde del precipicio (y ahí estamos).
Jamás olvidaré la santa indignación de Horacio tras ver una pieza publicitaria televisiva que promocionaba el sorteo de un automóvil cero kilómetro: un meritorio trabajador acaba de comprarse su auto tras muchos esfuerzos. El tipo lo está lavando en la puerta de su casa y reflexiona sobre los valores que le inculcó su papá ya fallecido (el trabajo, el ahorro, la constancia). El hombre mira hacia lo alto, hacia un cielo azul perfecto, en señal de agradecimiento. En eso llegan los bullangueros vecinos con un auto igualito, del mismo color, que se lo acaban de ganar en un sorteo. El meritorio laburante no entiende por qué unos deben trabajar para conseguir lo que desean y otros simplemente tienen suerte. No entiende y alza sus ojos al cielo, esperando una iluminación paternal de algún tipo, pero entonces lo que ocurre (y así, brutalmente, cerraba la pieza publicitaria) es que una cagada de pájaro le golpea el parabrisas recién lavado.
Horacio consideraba que esa pieza publicitaria (magistral en su relato, implacable en la transmisión de ciertos valores) era un síntoma social de un deterioro creciente. Hay que señalar, para entender del todo el episodio, que esa pieza publicitaria se emitió en el Uruguay de finales de los años 80. Disneylandia ya asomaba sus garras.
Horacio Verzi, convencido de que la complejidad de la vida excede con mucho a esas desproblematizaciones banales, recorrió un camino de auto repliegue que provocó la desaparición de Graffiti, la publicación esporádica de algunas obras suyas (casi siempre gracias a premios y distinciones internacionales) y una labor incesante como docente e investigador que ha desplegado con humildad y seriedad impar durante los últimos  treinta años.
Él, que perpetró aventuras de gran calibre en varios momentos de su vida, que combatió a dictadores y chantas con el mismo entusiasmo, ahora vive con una serenidad un tanto irónica en La Barra de Maldonado, en un sitio que hasta hace unos años era una especie de paraíso perdido, pero que ya ha comenzado a sufrir los embates civilizatorios. Allí, Horacio y su mujer Isabel Romero pasan sus días, contemplan la naturaleza, estudian el comportamiento de los animales y las plantas, leen, miran películas y reciben amigos, conocidos y hasta extraños que cada tanto peregrinan en busca de la isla del tesoro y lo que hay en ella.
Es que en la isla robinsoniana de Horacio e Isabel puede haber muchos tesoros, lo que confunde a los peregrinos: los bosques, los libros, el bosque de libros en la gran sala presidida por una impresionante estufa a leña; o puede ser la familia de perros que desde hace décadas los acompaña a ambos (cómo olvidar al difunto Archibaldo, cómo no temerle al levantisco Sánchez, cómo no congeniar con el prescindente Cascarilla); o el tesoro isabelino de Horacio, esa mujer que me recuerda por su talante y modales a la Cora Munro de Fenimore Cooper.
En más de una ocasión me he preguntado a qué personaje de La isla del tesoro corresponde Horacio. Con él muchas veces recordamos el acertijo (“¿Cuántos hombres hay sobre el cofre del muerto?”). Por momentos se me asemeja a Ben Gunn, con su empeño en volver a la lucha. O al caballero Trelawney, siempre dispuesto a un lance honorable, algo distante en el trato pero de buen corazón. Sin embargo, me parece que Horacio es el capitán Smollett. Si hasta puedo verlo en una noche de tormenta, junto a la rugiente desembocadura del Maldonado, dispuesto a zarpar de nuevo por los mares del tiempo y de la vida.
Fernando Butazzoni (Montevideo, 1953). Narrador, ensayista, poeta, guionista y periodista.  Entre 1972 y 1985, vivió en Chile, Cuba, Nicaragua y Suecia. Luego del proceso electoral puede retornar al Uruguay, donde desarrollaría una intensa actividad periodística y literaria. Fue encargado de páginas culturales del semanario Brecha, director de la Revista de la Universidad de la República, secretario de redacción del matutino La República, corresponsal del diario Clarín de Buenos Aires y director y conductor de programas de radio y TV.
En narrativa ha publicado: Los días de nuestra sangre (cuentos, Cuba, 1979); La noche abierta (novela, Costa Rica, 1982); El tigre y la nieve (novela, Montevideo, 1986); La danza de los perdidos (novela, Montevideo, 1988); La noche en que Gardel lloró en mi alcoba (novela, Montevideo, 1996); Príncipe de la muerte (novela, Montevideo 1997); Mendoza miente (nouvelle, Montevideo, 1998); Libro de brujas novela, (novela, Montevideo, 2002); El tigre y la nieve (novela, Montevideo, 2006); El profeta imperfecto (novela, Montevideo,2007); Un lugar lejano (novela, Montevideo, 2009).
Asimismo ha dado a conocer en crónica  y ensayo Nicaragua: noticias de la guerra (Montevideo, 1986); el volumen de reportajes Seregni-Rosencof Mano a mano (Montevideo, 2002); Los ensayos del Orobon (Montevideo, 1998) y Alabanza de los reinos imaginarios, un recorrido por el castillo del conde de Lautréamont (Montevideo 2004).
Su obra ha recibido diversas distinciones, entre ellas,  los premios Casa de las Américas (Cuba, 1979), EDUCA de narrativa (Costa Rica, 1981),  Bartolomé Hidalgo (Uruguay, 2008) y fue finalista del Planeta-Casa de América (2007) y del Rómulo Gallegos(2009).
 
Horacio Verzi (Montevideo, Uruguay, 1947). Narrador, ensayista,  periodista y docente .  En 1983 obtuvo el Primer Premio de Narrativa del Certamen Anual Latinoamericano EDUCA  en Costa Rica por la novela “El mismo invisible pecho del cielo”.  Ha publicado las novelas “La otra orilla” (Montevideo, 1987), “Los caballos lunares” (Montevideo, 1991)  y “Toda la muerte” (Montevideo,1999;  mención en la categoría de novela inédita en el concurso anual 1998 del Ministerio de Educación y Cultura del Uruguay). Su relato “Reliquia familiar” obtuvo el Premio Iberoamericano de Cuento Julio Cortázar (Cuba, 2004). En ensayo dio a conocer parcialmente el aún inédito: ENTRE LA EXPECTACIÓN Y EL DESENCANTO.  Construcción y autorreconocimiento de la identidad personal en la poesía y la narrativa de Jorge Luis Borges (2010).
Horacio Verzi ejerció la  docencia en  La Habana, Cuba (1977-1982)  y trabajó como   investigador en el Centro de investigaciones literarias de Casa de las Américas (1981-1985).  Asimismo se desempeñó como redactor, corresponsal y editor de noticias en distintos medios periodísticos en países de América Central y el Caribe.
A su regreso al Uruguay, fundó y dirigió la revista Graffiti y la editorial  homónima (1989-1999). En la actualidad dicta clases en el Centro Regional de Profesores (CERP) de Punta del Este, Uruguay.

«La ciudadanía cultural y las leyes ‘Greaser’ del siglo 21»

English: Great Seal of The State of Alabama

Por Bruce Campbell

 
Los latinos están desapareciendo de las escuelas públicas, de las cocinas de los restaurantes, de las obras de construcción, y de los sembrados del estado de Alabama.

Se alegran los nativistas, xenófobos, racistas, y activistas y legisladores del Partido Republicano que apoyan la nueva legislación dura (HB 56) que toma por blanco a los migrantes indocumentados.

La huída de miles de latinos del estado a pesar de su estatus legal no es una consecuencia imprevista de la legislación – es precisamente su objetivo.  Como Lindsey Lyons, el alcalde de Albertville, Alabama, lo dijo en una entrevista con National Public Radio: «Vamos a ver un éxodo de los que se mudan a otros estados que no contemplen semejante legislación.»  El objetivo no es la reforma al sistema de inmigración; el objetivo es hacer que la población latina creciente se vaya.

Para los autores y para quienes apoyan la ley, el estado de Alabama está viviendo una fantasía que han promovido y han deseado ver puesta en escena al nivel nacional.  De modo importante, la fantasía de una población latina que se pierde de vista no es una fantasía estrictamente legal.  Se trata, de hecho, de un proyecto cultural, y tiene una larga historia.

Cultura, Poder, Ilusión
¿Cómo hacer que decenas de millones de latinos desaparezcan de la esfera pública nacional? Es un truco espectacular, comparable al truco del ilusionista David Copperfield cuando hizo desaparecer la Estatua de la Libertad frente a un público televisivo.  La decepción de Copperfield en 1983 se hizo bajo el cubierto de la oscuridad y usando una manipulación estratégica de la perspectiva del público. Las artimañas que buscan la invisibilidad relativa de los latinos en los Estados Unidos se llevan a cabo en plena luz y recurriendo a manipulaciones retóricas y medidas legislativas.

A estas alturas, nos es bastante familiar la retórica. La asociación constante, tocada como tambor por los nativistas anti-inmigrantes, entre los términos «ilegal» y «mexicano» y «inmigrante,» amplificada y reproducida por los medios masivos y en el discurso demagógico político, ha creado una nube semántica que oscurece la presencia, en plena vista, de diversos millones de latinos en la vida pública de los Estados Unidos.

El dueño de un restaurante en el vecindario donde vivo en Minneapolis, un hombre que había emigrado (legalmente) de Ecuador, me relató una experiencia que tuvo mientras tomaba un paseo veranal con su hijo. Fue interrogado por la policía, y la suposición pertinaz de los oficiales de policía fue que el ecuatoriano era mexicano, y al parecer creían también que había entrado a los Estados Unidos ilegalmente.

«Soy de Ecuador,» me dijo, «pero sólo podían ver a un mexicano ilegal.» La Estatua de la Libertad, se podría decir, se esfumó frente a sus propios ojos.

La ilusión pública en este caso resulta de mensajes culturales que niegan a los latinos su ciudadanía cultural – es decir, el derecho de ser diferente y de contribuir con esa diferencia al proceso público.  Teóricamente, todos los ciudadanos son iguales bajo la ley.  Sin embargo, en la práctica las normas culturales públicas están estructuradas por una jerarquía implícita de valores y privilegios que eleva a algunos ciudadanos por encima de otros.

Piense de cómo en una reunión pública el ciudadano que habla un inglés acentuado con una fonética no inglés podría conllevar menos autoridad moral con su audiencia que el locutor nativo hablante del inglés, a pesar de ser igualmente inteligibles y poseer los mismos derechos legales los dos. O piense de cómo un hombre que lleva un dashiki del oeste de África podría parecer, para muchas personas de un público estadounidense, un extranjero.  Las jerarquías de raza, clase social, género, y hasta edad se reflejan en el reconocimiento, o negación, de la ciudadanía cultural plena de diferentes grupos sociales.

Las marcas de las diferencias culturales en el cuerpo político pueden ser, y frecuentemente son, convertidos en signos de estatus de ciudadano de segunda clase.  Esta es una encrucijada importante de la cultura y la política en los Estados Unidos (igual que en otros países), un nexo de lo cultural y lo político que se aprovecha activamente por los que quisieran que los latinos se desaparecieran de la esfera pública.

El tomar por blanco a los inmigrantes con el martillo retórico de «ilegal» golpea pesadamente para sujetar en la mente pública una cadena de equivalencias.  Donde se trata de los latinos, el martillo y el yunque anti-inmigrantes de «ilegal» y «mexicano» buscan convertir a la piel morena, el español, y otras marcas de la visibilidad latina, en señales de la periferia de la vida pública estadounidense.  «Ellos,» nos dicen a los no latinos, no son como «nosotros.»

Destrás del amarillismo de los medios y de las posturas de campaña electoral, se halla una política de subrodinación y aislamiento cultural, y de divisionismo cívico. En la medida en que las marcas externas de la identidad latina se convierten en el equivalente cívico de letras escarlatas, los latinos se dejan menos legítimos como actores públicos, y menos visibles como compatriotas y ciudadanos. En el mismo proceso, los recursos específicos de su herencia cultural que podrían traer al proyecto nacional quedan categóricamente segregados y expulsados de las esfera pública.

Las consecuencias culturales son diversas. El español no se reconoce como lenguaje legítimo de participación cívica.  Regiones enteras del país se despojan de su rica herencia hispana en las mentes de muchos estadounidenses, a quienes se les facilita el olvido de la historia pluricultural grabada en topónimos como Arizona, Nevada, y Florida.

La ignorancia por parte del público estadounidense sobre los puertorriqueños – quienes a partir de la ley Jones de 1917 nacen ciudadanos de los Estados Unidos, aunque sin el derecho de votar en las elecciones de los Estados Unidos – se profundiza y se extiende a otra generación más.  El bilingüismo se hace sospechoso, en vez de ser reconocido como un tremendo recurso económico y cultural nacional, y como una virtud cívica.  Otras formas importantes de cultura pública – los murales, los corridos, las pachangas, entre otras – se castigan como cultura del Otro.  Las voces críticas de la política exterior de los Estados Unidos, las voces de las comunidades que tienen experiencia directa de las implicaciones para los derechos humanos para los Salvadoreños, para los Guatemaltecos, y otros, del financiamiento militar o de los tratados comerciales, se silencian.

Y mi vecino ecuatoriano-americano se encuentra enredado en una decepción de la cultura de masas que le niega la ciudadanía cultural plena, a pesar de sus derechos legales innegables.  Se le niega el poder de definir su propia presencia pública, su propia identidad como compatriota y ciudadano, y de ser reconocido como auténticamente Americano.

Ley, política, cultura
La magia negra promulgada por la retórica pública manipuladora tiene sus límites, afortunadamente.  La gente puede aguantar, y responder, los insultos.  Y el discurso público nunca es asunto de un solo lado.  Mi vecino ecautoriano-americano, por ejemplo, sin duda ha relatado su experiencia a muchos de sus compatriotas, produciendo una conciencia local que sirve de contrapeso en alguna medida para la tergiversación general de las realidades nacionales ejecutada por el amarillismo anti-inmigrante.  Los educadores siguen enseñando el español, y el interés estudiantil en el idioma sigue creciendo al lado del número creciente de estadounidenses que reconocen el valor político y económico y cultural del bilingüismo.

Y en algún momento, el discurso anti-inmigrante empieza a decir más sobre él que lo produce que sobre el objeto de su rencor.  De las 308 millones de cabezas contadas en el Censo de 2010, más de 50 millones (o más de 16%) se identificaron como Hispano o Latino. En algún momento, el hablar como si 16% de la nación no existiera (o no debiera existir) se convierte en estrategia de payaso (por no decir algo más fuerte).

Este es el momento en que entran en el escenario los mecanismos legislativos del  espectáculo cínico de la desaparición de los latinos.  Una confluencia de intereses xenófobos, nativistas, y Republicanos – después de haber visto desarrollarse los cambios demográficos de las últimas dos décadas, y al ver la consolidación de las consecuencias electorales de tales cambios – percibe una necesidad aún mayor de aislar la cultura latina y subordinar la participación pública de los latinos. Han aprendido que la retórica sola está perdiendo su magia.

De manera predicible, después de que las elecciones de 2008 resultaron en victorias convincentes para el Partido Demócrata, con márgenes significativos de apoyo entre los votantes latinos, en varios estados las asambleas legislativas bajo control Republicano han aprobado leyes que toman por blanco a los inmigrantes indocumentados.

La asamblea del estado de Arizona en 2010 aprobó SB 1070, una ley que criminaliza el no llevar consigo documentos que acrediten el estatus legal y permite que la policía detenga a cualquier persona sospechada de ser inmigrante indocumentado. (Para dejar claro que el blanco político y cultural incluía a los ciudadanos latinos, la mayoría Republicana también aprobó una ley que prohibe la enseñanza de Estudios Étnicos en las escuelas públicas.)  Luego, en 2011, los estados de Georgia, Indiana, Utah, y Carolina del Sur aprobaron sus propias versiones de la ley de Arizona, promoviendo de manera semejante las prácticas del perfil racial en el tratamiento oficial a los latinos y la criminalización de los esfuerzos por integrar económicamente y socialmente a los inmigrantes indocumentados.

No queriendo quedarse atrás, el estado de Alabama aprobó HB 56, una ley que, entre otras cosas, prohibe a que los inmigrantes indocumentados asistan a las unidersidades estatales, criminaliza «el transporte, el hospedaje, o el alquiler de propiedad» a los indocumentados, y requiere que las escuelas públicas verifiquen el estatus legal de todos sus estudiantes.

Estas leyes aplican el poder del estado – en la forma de las prácticas del perfil racial – para apoyar los mensajes culturales que subordinan y marginalizan a los latinos y los excluyen de las esfera pública.  Una medida del efecto cultural de la ley en Alabama: los niños latinos que no han desaparecido de las escuelas públicas ahora reportan que son maltratados e intimidados por otros niños que les dicen «ilegales.»

Todos estos estados comparten dos elementos clave: Primero, el gobierno del estado está bajo el control del Partido Republicano, y segundo, el Censo de 2010 halló una tasa de crecimiento drámatica de la población latina/hispana entre 2000-2010, un crecimiento demográfico que pronto o tarde podría poner en peligro la dominancia política de los Republicanos en el estado.

Georgia, Carolina del Sur, y Alabama vieron tasas de crecimiento alucinantes para la población latina/hispana, de 96.1%, 147.9%, and 144.8%, respectivamente. La tasa de crecimiento en Indiana para la categoría demográfica de Latinos/Hispanos fue 81.7%, y en Utah’s 77.8%, casi doble la tasa nacional para el mismo sector de la población. En el caso de Arizona, el crecimiento del sector latino/hispano fue «sólo» 46.3% – pero lo que sería aún más preocupante para los Republicanos, los racistas, y los xenófobos: la población latina/hispana había llegado a representar aproximadamente 30% de la población del estado.

Es difícil no llegar a la conclusión de que la legislación anti-inmigrante en estos estados se trata de un esfuerzo por cambiar los hechos demográficos para futuras elecciones, y antes del momento inevitable en que una reforma federal y comprensiva de la política migratoria ofrezca una oportunidad para hacerse ciudadanos a los estimados 12 millones de inmigrantes indocumentados en la nación, principalmente de México y Centroamérica.

A la misma vez, la legislación anti-inmigrante al nivel estatal puede verse como un esfuerzo desesperado por usar la ley como aparato para extender la vida de una política cultural que ha buscado históricamente la subordinación y la exclusión de los latinos de la esfera pública.

Redefiniendo América
Lo que está en juego en la coyuntura actual no es una cuestión solamente de leyes y resultados electorales.  Los parámetros culturales de la vida pública en los Estados Unidos también se están jugando. Lo que está en juego en el largo plazo es nada menos que las formas y el significado de la vida pública democrática en América  – es decir, la cuestión de quién se permite hablar, y cómo, y sobre qué.

Es importante recordar (y no permitir que otros olviden) que la cultura política que niega a los latinos la igualdad en la vida pública en los Estados Unidos tiene una larga historia.  Los esfuerzos actuales por expulsar a los latinos de la vida pública tienen parentesco común en los asaltos a los mexicano-americanos que ocurrieron después del Tratado de Guadalupe Hidalgo de 1848, el acuerdo oficial que puso fin a la guerra entre los Estados Unidos y México, y mediante el cual México cedió a los Estados Unidos aproximadamente la mitad de su territorio nacional.

El Tratado de 1848 incluyó una opción de ciudadanía estadounidense para los muchos mexicanos que de repente se econtraron viviendo en territorio ajeno, pero el sentimiento xenófobo y racista conspiró con ciertos intereses económicos para despojar a los mexicanos de su tierra en toda la región afectada por el Tratado, y quitándoles además sus concesiones mineras en California durante la fiebre de oro en aquella época. Una de las múltiples maneras en que estos intereses operaron al cuerpo social para extirpar la presencia mexicano-americana fue el aprobar de legislación que tomaba por blanco a los aspirantes a la ciudadanía.

Las leyes «Greaser» (así llamadas por sus partidarios, con el término racista «Greaser» indicando claramente el objetivo de la legislación) incluyeron una ley infame que se aplicaba explícitamente a «Toda persona típicamente conocida como ‘Greaser’ o de sangre india o española…y que anda armada y no es pacífica y quieta» [«All persons who are commonly known as ‘Greasers’ or the issue of Spanish and Indian blood…and who go armed and are not peaceable and quiet persons»]. Este ataque legislativo contra la presencia pública de los mexicano-americanos y los indígenas fue antecedida por el Impuesto al Minero Extranjero de 1850, el cual les cobró una tarifa abusiva a las concesiones mineras de los no nativos, con la consecuencia práctica de despojar a los mexicanos y latinoamericanos (y los franceses y alemanes) de sus concesiones en el contexto de la Fiebre de Oro. Por supuesto, la hostilidad xenófoba avivada contra los hispanohablantes ninguna distinción hizo entre los mexicanos y los californios nativos.

La política cultural que intenta desaparecer a los latinos no podrá superar la realidad contundente de una población creciente.  David Copperfield pudo desaparecer a la Estatua de la Libertad, pero al salir el sol la próxima mañana, allí estaba otra vez.  La diferencia es que Copperfield no quería cambiar el significando de la Libertad.

A final de cuentas, los intentos nativistas por actualizar para el siglo 21 las leyes «Greaser» del siglo 19, no harán que los latinos desaparezcan literalmente. Pero las artimañas en este caso cambian el significado potencial de América, disminuyen las posibilidades democráticas, debilitan el diálogo y las relaciones sociales posibles tanto en el presente como en el futuro.  Los recursos culturales y las perspectivas que los latinos podrían traer consigo a la mesa común se desprecian y se mantienen al margen de la esfera pública nacional.  Nuestros esfuerzos por contrarrestar la desigualdad promulgada y promovida por estas leyes necesitan encararse con la dimensión cultural de la lucha por definir la democracia americana.

Bruce Campbell es profesor de Estudios Latinos/Latinoamericanos en St. John’s University en Collegeville, MN.  Es autor de ¡Viva la historieta!: Mexican Comics, NAFTA, and the Politics of Globalization (University Press of Mississippi, 2009), y Mexican Murals in Times of Crisis (University of Arizona, 2003)

Fewer Kids in the U.S.

USA states population density map

By Conor Dougherty

The U.S. under-18 population fell between 2010 and 2011, the first time in at least two decades that the country has seen its minor population decline, according to demographers and new Census data.

The U.S. under-18 population was 73,934,272 in July 2011, a decline of 247,000 or 0.3% from July of 2010, according to an analysis of Census data by William H. Frey, a demographer atThe Brookings Institution. The child population is still up 2.3% from 2000, largely because of gains made in the early-decade boom years.

The child population is falling because fewer immigrant children are coming across U.S. borders, and because fewer children are being born. Meantime, the so-called millennial generation is moving into adulthood. With fertility rates down, Mr. Frey says “it doesn’t look like a youth boom will reverberate anytime soon.”

The U.S. minor population fell in the 1970s as well, as baby boomers moved into adulthood and women entered the labor force en masse, delaying families in the process. A large drop in fertility was also behind a decline in minors between 1920 and 1930.

States with the biggest drop in children tended to be concentrated in the aging Rust Belt and New England. Every New England state saw its under 18 population fall 1% or greater from April 2010 to July 2011 (state Estimates are over a different time period than the national tally). Michigan and Pennsylvania were also big losers. Also, while the drops were small, states including Arizona and Nevada saw their minor populations fall after huge gains earlier in the decade.

 

La cocina oscura de los premios Nobel

English: Graham Greene (writer) Magyar: Graham...

La Academia sueca rechazó dar el Nobel a Tolkien por la poca categoría de su prosa

 

Se hacen públicas las deliberaciones del jurado que concedió el galardón de literatura en 1961 al yugoslavo Andric

La fantasía épica de El señor de los anillos ha vendido millones de ejemplares en todo el mundo. A los seguidores de esta saga les gustará saber que, sin embargo, sus historias de hobbits, ogros y elfos fueron rechazadas por el jurado de los Premios Nobel en 1961, que las consideró prosa de segunda categoría, según unos documentos desclasificados hace días y revelados por el periodista sueco Andreas Ekström en el diario Sydsvenska Dagbladet. Las siempre misteriosas deliberaciones del comité de los galardones de la Academia sueca no se desvelan hasta 50 años después de su entrega, cuando la biblioteca de la fundación Nobel abre sus archivos. En 2012 toca saber qué ocurrió en 1961. Y lo que sucedió fue que el jurado descartó para el Nobel de Literatura a nombres como Lawrence Durrell, Graham Greene, J. R. R. Tolkien, Robert Frost y Edward Morgan Foster, entre otros ilustres, para coronar al bosnio -entonces yugoslavo- Ivo Andric.

En otros casos las razones para el descarte fue «la avanzada edad», como con el estadounidense Robert Frost

Andric fue reconocido por «la fuerza épica con la que traza temas y representa destinos humanos dibujados a partir de la historia de su país». La Academia sueca siempre suele brindar una frase rimbombante que justifica su decisión. Por ejemplo, del último afortunado, el poeta sueco Tomas Trantromer, dijo que «sus imágenes condensadas y translúcidas, nos da un acceso fresco a la realidad». Pues bien, los candidatos derrotados en 1961 no merecieron comentarios elogiosos. Más bien fueron despachados de mala gana y con displicencia por el comité de los Nobel, señala el diario The Guardian. Así, la prosa de John Ronald Reuel Tolkien (1892-1973) -cuya candidatura había presentado su amigo irlandés y profesor de literatura C.S. Lewis- no estaba, «en modo alguno, a la altura de la narración de más alta calidad», sentenció el insigne miembro del jurado Anders Österling. El señor de los anillos se había publicado en 1954 en Reino Unido y su adaptación más célebre es la trilogía del cineasta neozelandés Peter Jackson.

Tampoco se cortaron los suecos al hablar de otros candidatos al máximo galardón de las letras mundiales. De Durrell, el autor de El cuarteto de Alejandría, recelaron de su «dudoso gusto», debido a su «preocupación monomaniaca con complicaciones eróticas»; y la obra del novelista italiano Alberto Moravia padecía una «monotonía general». En otros casos las razones para el descarte fue «la avanzada edad», como le pasó al poeta estadounidense Robert Frost, que entonces tenía 86 años -«un obstáculo fundamental»- y murió dos después sin llevarse el Nobel a la tumba. Del novelista y ensayista inglés E. M. Foster, el jurado Österling aseveró que entonces era «una sombra de sí mismo, con la salud espiritual perdida hace mucho tiempo».

Greene, segundo

Graham Greene, que 11 años antes había publicado El tecer hombre, fue el segundo en las deliberaciones de la Academia, y la tercera en el podio fue la danesa Karen Blixen, más conocida como Isak Dinesen, (Memorias de África).

El periodista sueco Andreas Ekström, que lleva un lustro informando de este tipo de documentos cada vez que salen a la luz pública, destaca que es la primera ocasión en que se ha encontrado a Tolkien «entre los que optaban al premio». En la actualidad hay cada edición «unos 300 aspirantes», pero entonces solo se presentaban «unos 50», añade. No obstante, usted no puede presentar un candidato al Nobel de Literatura por mucho que le guste. La Academia sueca solo acepta a nominados procedentes de otras academias, anteriores ganadores, instituciones representativas y, también, los que ella misma propone.

«La Academia mantiene un estricto secreto de sus archivos durante medio siglo aunque después tampoco saca todo a la luz», añade el reportero. «La lista de sugerencias sobre quién puede ganar el Nobel sí se hace pública, conjuntamente con algunos comentarios», agrega. En esta historia, el malo de la película, el crítico literario y miembro dominante en el comité sueco en esta materia, Anders Österling, sentenció con su lapidaria frase a El señor de los anillos: «No es parangonable a las narraciones de más alta calidad». Al aventurero Frodo no le habría hecho ni pizca de gracia.

[fuente: EL PAÍS Madrid ]

My Take: The 3 biggest biblical misconceptions

Editor’s note: John Shelby Spong, a former Episcopal bishop of Newark, New Jersey, is author of «Re-Claiming the Bible for a Non-Religious World

By John Shelby Spong, Special to CNN

The Bible is both a reservoir of spiritual insight and a cultural icon to which lip service is still paid in the Western world. Yet when the Bible is talked about in public by both believers and critics, it becomes clear that misconceptions abound.

To me, three misconceptions stand out and serve to make the Bible hard to comprehend.

First, people assume the Bible accurately reflects history. That is absolutely not so, and every biblical scholar recognizes it.

The facts are that Abraham, the biblically acknowledged founding father of the Jewish people, whose story forms the earliest content of the Bible, died about 900 years before the first story of Abraham was written in the Old Testament.

Actually, that’s not in the Bible

Can a defining tribal narrative that is passed on orally for 45 generations ever be regarded as history, at least as history is understood today?

Moses, the religious genius who put his stamp on the religion of the Old Testament more powerfully than any other figure, died about 300 years before the first story of Moses entered the written form we call Holy Scripture.

This means that everything we know about Moses in the Bible had to have passed orally through about 15 generations before achieving written form. Do stories of heroic figures not grow, experience magnifying tendencies and become surrounded by interpretive mythology as the years roll by?

My Take: Bible condemns a lot, so why focus on homosexuality?

Jesus of Nazareth, according to our best research, lived between the years 4 B.C. and A.D. 30. Yet all of the gospels were written between the years 70 to 100 A.D., or 40 to 70 years after his crucifixion, and they were written in Greek, a language that neither Jesus nor any of his disciples spoke or were able to write.

Are the gospels then capable of being effective guides to history? If we line up the gospels in the time sequence in which they were written – that is, with Mark first, followed by Matthew, then by Luke and ending with John – we can see exactly how the story expanded between the years 70 and 100.

For example, miracles do not get attached to the memory of Jesus story until the eighth decade. The miraculous birth of Jesus is a ninth-decade addition; the story of Jesus ascending into heaven is a 10th-decade narrative.

In the first gospel, Mark, the risen Christ appears physically to no one, but by the time we come to the last gospel, John, Thomas is invited to feel the nail prints in Christ’s hands and feet and the spear wound in his side.

Perhaps the most telling witness against the claim of accurate history for the Bible comes when we read the earliest narrative of the crucifixion found in Mark’s gospel and discover that it is not based on eyewitness testimony at all.

My Take: Yes, the Bible really condemns homosexuality

Instead, it’s an interpretive account designed to conform the story of Jesus’ death to the messianic yearnings of the Hebrew Scriptures, including Psalm 22 and Isaiah 53.

The Bible interprets life from its particular perspective; it does not record in a factual way the human journey through history.

The second major misconception comes from the distorting claim that the Bible is in any literal sense “the word of God.” Only someone who has never read the Bible could make such a claim. The Bible portrays God as hating the Egyptians, stopping the sun in the sky to allow more daylight to enable Joshua to kill more Amorites and ordering King Saul to commit genocide against the Amalekites.

Can these acts of immorality ever be called “the word of God”? The book of Psalms promises happiness to the defeated and exiled Jews only when they can dash the heads of Babylonian children against the rocks! Is this “the word of God? What kind of God would that be?

The Bible, when read literally, calls for the execution of children who are willfully disobedient to their parents, for those who worship false gods, for those who commit adultery, for homosexual persons and for any man who has sex with his mother-in-law, just to name a few.

The Bible exhorts slaves to be obedient to their masters and wives to be obedient to their husbands. Over the centuries, texts like these, taken from the Bible and interpreted literally, have been used as powerful and evil weapons to support killing prejudices and to justify the cruelest kind of inhumanity.

The third major misconception is that biblical truth is somehow static and thus unchanging. Instead, the Bible presents us with an evolutionary story, and in those evolving patterns, the permanent value of the Bible is ultimately revealed.

It was a long road for human beings and human values to travel between the tribal deity found in the book of Exodus, who orders the death of the firstborn male in every Egyptian household on the night of the Passover, until we reach an understanding of God who commands us to love our enemies.

The transition moments on this journey can be studied easily. It was the prophet named Hosea, writing in the eighth century B.C., who changed God’s name to love. It was the prophet named Amos who changed God’s name to justice. It was the prophet we call Jonah who taught us that the love of God is not bounded by the limits of our own ability to love.

It was the prophet Micah who understood that beautiful religious rituals and even lavish sacrifices were not the things that worship requires, but rather “to do justice, love mercy and walk humbly with your God.” It was the prophet we call Malachi, writing in the fifth century B.C., who finally saw God as a universal experience, transcending all national and tribal boundaries.

One has only to look at Christian history to see why these misconceptions are dangerous. They have fed religious persecution and religious wars. They have fueled racism, anti-female biases, anti-Semitism and homophobia.They have fought against science and the explosion of knowledge.

The ultimate meaning of the Bible escapes human limits and calls us to a recognition that every life is holy, every life is loved, and every life is called to be all that that life is capable of being. The Bible is, thus, not about religion at all but about becoming deeply and fully human. It issues the invitation to live fully, to love wastefully and to have the courage to be our most complete selves.

That is why I treasure this book and why I struggle to reclaim its essential message for our increasingly non-religious world.

The opinions expressed in this commentary are solely those of John Shelby Spong.

Niños de Burkina Faso cosechan algodón para Victoria’s Secret

«El secreto de Victoria»

Los programas de comercio justo no logran controlar a los agricultores que explotan a niños

BLOOMBERG Londres
Niños de Burkina Faso cosechan algodón para Victoria’s Secret / BLOOMBERG

La pesadilla de Clarisse Kambire casi nunca cambia. Es de día. En un campo de algodón que estalla en flores color púrpura y blanco, un hombre se inclina sobre ella blandiendo un palo sobre su cabeza. Entonces retumba una voz, que sacude a Clarisse de su sueño y hace que su corazón dé un salto. “¡Levántate!”.

El hombre que le ordena levantarse es el mismo que aparece en el sueño de la chiquilla de 13 años: Victorien Kamboule, el agricultor para el cual trabaja en un campo de algodón en África occidental. Antes del amanecer, una mañana de noviembre se levanta de la colchoneta plástica desteñida que le sirve de colchón, apenas más gruesa que la tapa de una revista de moda, abre la puerta metálica de su choza de barro y fija sus ojos almendrados en la primera jornada de cosecha de esta temporada.

Ya venía temiéndolo. “Estoy empezando a pensar en cómo me gritará y me volverá a golpear”, había dicho dos días antes. Preparar el campo fue aún peor. Clarisse ayudó a cavar más de 500 surcos sólo con sus músculos y una azada, que reemplazan al buey y el arado que el granjero no puede pagar. Si ella es lenta, Kamboule la azota con una rama de árbol.

Esta es la segunda cosecha de Clarisse. El algodón de la primera pasó de sus manos a los camiones de un programa de Burkina Faso que maneja algodón certificado como comercio justo. La fibra de esa cosecha luego fue a fábricas en India y Sri Lanka, donde se creó ropa interior para Victoria’s Secret.

Algodón de Clarisse

“Fabricado con 20% de fibras orgánicas de Burkina Faso”, se lee en la etiqueta de la prenda, comprada en octubre.

El trabajo forzoso y el trabajo infantil no son una novedad en las granjas africanas. Se supone que el algodón de Clarisse, producto de ambas cosas, es diferente. Está certificado como orgánico y comercio justo, y por ende debería estar a salvo de semejantes prácticas.

Sembrada cuando Clarisse tenía 12 años, toda la cosecha orgánica de Burkina Faso de la última temporada fue comprada por Victoria’s Secret, según Georges Guebre, líder del programa nacional orgánico y de comercio justo, y Tobias Meier, responsable de comercio justo en Helvetas Swiss Intercooperation, una organización para el desarrollo con sede en Zúrich que estableció el programa y ha contribuido a comercializar el algodón para compradores globales. Meier dice que en principio Victoria’s Secret se quedaría también con la mayor parte de la cosecha orgánica de este año.

Bandera verde de identificación

El líder de la cooperativa local de comercio justo en el pueblito de Clarisse confirmó que su granjero es uno de los productores del programa. Al borde del campo donde ella trabaja hay una bandera verde de identificación, que entregan a sus productores.

Como socia de Victoria’s Secret, la organización de Guebre, la Federación Nacional de Productores de Algodón de Burkina, es responsable de manejar todos los aspectos del programa orgánico y de comercio justo en Burkina Faso. Conocida por sus iniciales francesas, la UNPCB (Union Nationale des Producteurs de Cotton du Burkina Faso) en 2008 copatrocinó un estudio en el cual se indicaba que cientos o quizá miles de niños como Clarisse podían ser vulnerables a la explotación por parte de productores y de Helvetas. Victoria’s Secret dice que nunca vio ese informe.

El trabajo de Clarisse pone en evidencia las deficiencias del sistema para certificar como comercio justo productos básicos y terminados en un mercado global que creció un 27% en apenas un año, hasta más de 5.800 millones de dólares en 2010 (4.500 millones de euros). Ese mercado se funda en la noción de que las compras realizadas por empresas y consumidores no deben hacer a éstos cómplices de la explotación, sobre todo de niños.

Perversión del comercio justo

En Burkina Faso, donde el trabajo infantil es endémico en la producción de su principal cultivo de exportación, pagar sobreprecios lucrativos por el algodón orgánico y de comercio justo ha creado –de manera perversa- nuevos incentivos para la explotación. El programa atrajo a agricultores de subsistencia que dicen no tener recursos para cultivar algodón con certificación de comercio justo sin violar un principio central del movimiento: obligar a trabajar en sus campos a niños ajenos.

Una ejecutiva de la casa matriz de Victoria’s Secret asegura que la cantidad de algodón que compra la firma a Burkina Faso es mínima, pero que toma seriamente las acusaciones relativas al trabajo infantil.

BLOOMBERG

“Describen una conducta contraria a los valores de nuestra empresa y el código laboral y las normas de origen que exigimos cumplir a todos nuestros proveedores”, dijo en un comunicado Tammy Roberts Myers, vicepresidenta de comunicaciones externas de Limited Brands Inc. Victoria’s Secret es la unidad más grande de la empresa de Columbus, Ohio.

“Nuestras normas prohíben específicamente el trabajo infantil”, dijo. “Estamos enérgicamente empeñados en investigar a fondo esta cuestión con las partes interesadas”.

En los campos

Para comprender la terrible situación de Clarisse y otros niños, la agencia Bloomberg pasó más de seis semanas haciendo reportajes en Burkina Fasso, entre otros, a Clarisse, su familia, los vecinos y los dirigentes de su aldea. Sus experiencias son similares a las de otros seis niños entrevistados exhaustivamente por Bloomberg, como un chiquillo escuálido de 12 años que trabaja en un campo vecino.

En granjas de parcelas pequeñas como la de Kamboule en todo Burkina Faso, investigadores patrocinados por la federación de productores constataron en 2008 que más de la mitad de los 89 productores sondeados tenía un total de 90 chicos acogidos temporalmente menores de 18 años. Muchos tenían dos o más. El problema era agudo en el sudoeste del país, que constituye el centro de producción del programa y es la tierra natal de Clarisse. Ese año, había unos 7.000 agricultores en comercio justo, según datos de Helvetas.

El estudio reveló que dos tercios de los niños acogidos temporalmente en casas como la de Kamboule no iban a la escuela como se exigía que lo hicieran. Los granjeros adheridos al programa de comercio justo dijeron a los investigadores que no les pagaban a los niños, lo que llevó a los autores del estudio a escribir “Esta categoría de niños constituye un problema en varios niveles: en cuanto a su vulnerabilidad social por un lado, y en cuanto a su situación en el trabajo por otro. Estos chicos acogidos temporalmente están en situación de empleado: obviamente se les pide que trabajen, como lo expresaron los productores con sus propias palabras, pero no reciben ninguna remuneración, independientemente de la edad”.

Nada sobre niños

Kamboule y algunos productores dicen que nadie del programa les impartió normas o capacitación sobre el trabajo infantil en sus granjas. Una instrucción cara a cara sería una necesidad en un país donde 71 por ciento de la población no sabe leer.

“No, no nos dijeron nada sobre niños”, recordó Louis Joseph Kambire, de 69 años, un granjero nervudo de comercio justo que forma parte de la comisión de auditoría de la cooperativa Benvar, la aldea de Clarisse. Como no tiene hijos propios, Kambire obliga a los niños acogidos temporalmente que tiene a su cargo a trabajar en un campo de algodón orgánico y comercio justo que cultiva junto al de Clarisse.

“Por eso trabajan para mí”, dice. Antes del programa de comercio justo, no los hacía trabajar en sus campos de subsistencia.

Ha habido escasos esfuerzos o ninguno por mejorar la capacitación después del informe de 2008, según las entrevistas de Bloomberg con granjeros en cinco de las seis aldeas donde se realizó el sondeo.

Almacenar el algodón

Clarisse acarrea su fanega hasta la casa de un vecino donde Kamboule almacena su algodón porque está más cerca del punto de recolección para el programa orgánico y de comercio justo. La casa, de un lujo relativo con su piso de cemento, se encuentra pasando la escuela a la que antes asistía.

De regreso en la choza de Kamboule, bajo la luz de una luna llena, Clarisse dice que usará parte del agua que sacó del pozo para lavarse y luego irá a las casas de los vecinos y amigos del pueblo. Si están comiendo, aguardará educadamente hasta que le ofrezcan algo de comida. Para un “enfant confié”, esta es la vida de todos los días, dice Clarisse: “Sin tu madre cerca, eres como un huérfano”.

Muy lejos, en el centro de Manhattan, Irina Richardson dice que compra corpiños y ropa interior Victoria’s Secret desde hace 15 años y la ponía contenta pensar que hacía un bien. Al enterarse del papel de Clarisse en la provisión del algodón para la lencería, esta administradora de propiedades de Long Island, de 51 años, dijo que se quedó pasmada: “Comprar algo fabricado en semejantes condiciones es una falta de respeto a otros seres humanos”.

[fuente >> ]

Joe Arpaio Unfairly Targeted Latinos, Justice Department Says

English: cropped from File:Maricopa County She...

Arizona Sheriff’s Office Unfairly Targeted Latinos, Justice Department Says

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Published: December 15, 2011

PHOENIX — In a harshly worded critique of the country’s best-known sheriff, the Justice Department accused Joe Arpaio of the Maricopa County Sheriff’s Office of engaging in “unconstitutional policing” by unfairly targeting Latinos for detentions and arrests and retaliating against those who complain.

Maricopa County Sheriff Joe Arpaio in El Mirage, Ariz., on Dec. 5.

After an investigation that lasted more than three years, the civil rights division of the Justice Department said in a 22-page report that the sheriff’s office has “a pervasive culture of discriminatory bias against Latinos” that “reaches the highest levels of the agency.” The department interfered with the inquiry, the government said, prompting a lawsuit that eventually led Mr. Arpaio and his deputies to cooperate.

“We have peeled the onion to its core,” said Thomas E. Perez, the assistant attorney general for civil rights, noting during a conference call with reporters on Thursday morning that more than 400 inmates, deputies and others were interviewed as part of the review, including Mr. Arpaio and his command staff. Mr. Perez said the inquiry, which also included jail visits and reviews of thousands of pages of internal documents, raised the question of whether Latinos were receiving “second-class policing services” in Maricopa County.

The report stems from a civil inquiry and Mr. Perez said he hoped that Mr. Arpaio would cooperate with the federal government in turning the department around. Should he refuse, a lawsuit will be filed and his department could lose millions of dollars in federal funding, Mr. Perez said.

A separate federal grand jury investigation of Mr. Arpaio’s office is continuing, focusing on accusations of abuse of power by the department’s public corruption squad.

Mr. Arpaio was singled out for criticism in the report, which faulted him as distributing racially charged letters he had received and helping to nurture the department’s “culture of bias.”

Asked at a news conference about Mr. Arpaio’s role in the department’s problems, Mr. Perez said: “We have to do cultural change and culture change starts with people at the top.” Mr. Perez made a point of reaching out to Mr. Arpaio’s underlings. “These findings are not meant to impugn your character,” he said to the department’s deputies.

Mr. Arpaio, 79, who calls himself “America’s toughest sheriff,” did not immediately respond to the charges but he has brushed off similar accusations in the past.

Long a lightning rod for controversy, Mr. Arpaio looms large over Arizona and beyond. His turf, Maricopa County, with 3.8 million residents, is one of the country’s largest counties in terms of both area and population. Republican candidates clamor for his backing, aware that he has become a potent symbol of the antipathy many Americans feel about illegal immigration.

Before he endorsed former Gov. Rick Perry of Texas for president last month, Mr. Arpaio was courted by much of the Republican field, including Representative Michele Bachmann, former Gov. Mitt Romney of Massachusetts and Herman Cain, a businessman who has since suspended his campaign.

The findings, which Mr. Arpaio is sure to contest, paint a picture of a department staffed by poorly trained deputies who target Latino drivers on the roadways and detain innocent Latinos in the community in their searches for illegal immigrants. The mistreatment, the government said, extends to the jails the department oversees, where Latino inmates who do not speak English were mistreated.

“The absence of clear policies and procedures to ensure effective and constitutional policing, along with the deviations from widely accepted policing and correctional practices, and the failure to implement meaningful oversight and accountability structures, have contributed to a chronic culture of disregard for basic legal and constitutional obligations,” the report said.

The report said that Latino drivers were four to nine times more likely to be stopped in the sprawling county, which includes Phoenix and its environs, than non-Latino drivers. The expert who conducted the study called it the most egregious racial profiling he has ever seen in this country, said Mr. Perez, the prosecutor.

The report said that roughly one-fifth of the traffic-related incident reports generated by the department’s human smuggling unit contained information indicating the stops may have been conducted in violation of the Fourth Amendment’s prohibition on unreasonable seizures.

Dilma Rousseff 1970

 

Dilma na sede da Auditoria Militar no Rio de Janeiro, em novembro de 1970. Ao fundo, os oficiais que a interrogavam sobre sua participação na luta armada escondem o rosto com a mão (Foto: Reprodução que consta no processo da Justiça Militar)

A vida quer coragem (Editora Primeiro Plano), do jornalista Ricardo Amaral, chega às livrarias na primeira quinzena de dezembro. A foto [acima], inédita, está no livro que conta a trajetória de Dilma Rousseff da guerrilha ao Planalto.

Amaral, que foi assessor da Casa Civil e da campanha presidencial, desencavou a imagem no processo contra Dilma na Justiça Militar. A foto foi tirada em novembro de 1970, quando a hoje presidente da República tinha 22 anos.

Após 22 dias de tortura, ela respondia a um interrogatório na sede da Auditoria Militar do Rio de Janeiro.

 

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Fiction from Argentina

[«fascinates» is another right word for both a misunderstanding and a misjudgment]

Decir que la literatura argentina que vuelve su mirada a los horrores de la dictadura “fascina a los novelistas” es una frivolidad y demuestra lo poco que algunos británicos que escriben sobre literatura rioplatense conocen de esos escritores, como el citado Ernesto Sábato. Se puede decir que a los lectores de Agatha Christie les fascinan las historias de crímenes y misterios artificiales, propio de la literatura policial clase B. Pero aplicar la misma regla, o la misma sensibilidad para calificar la literatura posdictadura en América latina es definitivamente una frivolidad y una grave imprecisión critica. Sería como decir que a un paciente que concurre al psicoanalista le fascina su pasado. No debemos reducir la literatura a una función psicológica pero tampoco excluir esta valiosa e inegable dimensión, entre tantas otras, como la espiritual, la politica, la erotica, y la estrictamente estetica en un sentido restringito del arte de juntar palabras, sonidos, ideas e imágenes. Los escritores, los artistas en general, como los lectores, cuando no son sólo instrumentos de diversión o de marketing literario, son pacientes, chamanes y exorcistas de esos monstruos. Que además usen un medio artístico con valores estéticos no disminuye su condición de “médiums” entre un pasado horrible y un presente que lucha por sanar y recuperar una existencia plena, entre otras formas, a través del arte. La estética es parte de esa necesidad de exploración y, si se me permite la especificidad, de exorcismo y curación.

J.M.

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The Economist

Ernesto Sábato, who died in April at the age of 99, described his task as a “slow descent into hell”. Ever since “Never Again”, his 1984 report on the “dirty war”, generations of Argentine novelists have followed Sábato into the inferno.

The price of love

The junta’s policy of eliminating its enemies still fascinates Argentina’s novelists

Nov 26th 2011

The Argentine dream

Purgatory. By Tomás Eloy Martínez. Translated by Frank Wynne. Bloomsbury; 273 pages; $17 and £16.99. Buy from Amazon.comAmazon.co.uk

An Open Secret. By Carlos Gamerro. Translated by Ian Barnett. Pushkin Press; 286 pages; $15 and £10. Buy fromAmazon.comAmazon.co.uk

Open Door. By Iosi Havilio. Translated by Beth Fowler. And Other Stories; 213 pages; £10. Buy from Amazon.co.uk

7 Ways to Kill a Cat. By Matías Néspolo. Translated by Frank Wynne. Harvill Secker; 246 pages; £10.99. Buy from Amazon.co.uk

IT SEEMS appropriate now that Argentina’s investigation into the fate of itsdesaparecidos—the 8,960 people officially known to have “disappeared” under the military dictatorship of 1976-83—was headed by a writer. Ernesto Sábato, who died in April at the age of 99, described his task as a “slow descent into hell”. Ever since “Never Again”, his 1984 report on the “dirty war”, generations of Argentine novelists have followed Sábato into the inferno.

For Argentine society, the chapter never closes. Continuing revelations about hundreds of adopted children who were abducted with their parents, or born in custody, have resulted in DNA tests and legal challenges by a campaigning group, “Grandmothers of the Plaza de Mayo”. Two of these fine recent novels revisit events during the junta. The others—both exceptional debuts—focus on a disturbing present, yet are haunted by unexplained disappearances.

Tomás Eloy Martínez (pictured above), a prominent journalist, novelist and academic who spent years in exile and died in 2010, is known for his explorations of the psychology of Peronism, among them “Santa Evita” (1995). In “Purgatory” (2008), his last novel, an Argentine cartographer in suburban New Jersey senses that her husband has returned to her, no older than when he disappeared 30 years earlier. After years of searching, she remains impervious to evidence of his death as it would confirm that her father, a cheerleading propagandist for the junta, connived in his killing. The novel alludes to the mixture of hypocrisy and collusion that characterised that period, and the banal sentimentality of its distractions—flying saucers, soap operas, fatherland and fútbol (the infamous 1978 World Cup hosted and won by Argentina). The heroine’s state of denial and her ghostly and erotic delusions mirror a country still struggling with reality.

Craven complicity is at the heart of Carlos Gamerro’s “An Open Secret”, a literary thriller first published in 2002 that has the makings of a classic. The perfect crime is “one committed in the sight of everyone—because then there are no witnesses, only accomplices.” A veteran of the war in the Falklands (or Malvinas as they are known in Argentina) returns in the 1990s to his hometown in the pampas to probe the disappearance in custody of a troublesome young journalist during the weekend of Diego Maradona’s football debut 20 years earlier. He finds a “conspiracy of chattiness” rather than of silence, over a murder the whole town was in on.

Mr Gamerro, who was born in 1962, departs from a previous generation’s reverence for eyewitness testimony and memorialising the dead. The tone is hard-boiled, its cynicism alleviated by rare lyrical flights, and the desaparecido emerges as a spoilt mama’s boy and unsavoury womaniser. The “involuntary martyr” is no hero. The perspective is that of a generation seeking the unadulterated truth about their parents and grandparents during the “dirty war”—and hence their own identity. Amid the torrential self- justification of the townsfolk, from barbers to bankers, the subject becomes language itself, which is used to excuse and obfuscate. The stark epigraph is from William Burroughs: “To speak is to lie/To live is to collaborate.”

The bereaved mother in “An Open Secret” appears mad, though the madness is all around her. In “Open Door” by Iosi Havilio, who was born only in 1974, Argentina resembles an asylum. A young veterinary assistant relates how her female lover went missing. She fears that she may have seen her commit suicide off a bridge in Buenos Aires’s old port. Between trips to the morgue to identify corpses, she visits a pampas village named Open Door, after the psychiatric hospital that was founded there in 1898 as an “agricultural work colony”. In the countryside she moves between two partners: an ageing gaucho—whose name is the same as his ailing horse, Jaime—and an amoral, druggie country girl with plaits.

As sexual encounters unfold in the woman’s alienated voice, the characters merge with the village “loonies”. Events, like interchangeable lovers, have equal weight, from a stable fire to the brewing of maté tea, in an ambiguous tale that verges on dark comedy. A suspected UFO turns out to be the spotlit film set for a commercial. In an asylum without walls, there is “nothing to limit the illusion of absolute liberty”; ultimate control is when people no longer feel they are being coerced. With skill and subtlety, the novel hints that a whole society might labour under an illusion of liberty, manipulated by forces outside the frame.

What those malign forces might be is more explicit in “7 Ways to Kill a Cat” by Matías Néspolo, another debut novelist of Mr Havilio’s generation. His shantytown tale from southern Buenos Aires, which recalls the “City of God” slum in the Rio favelas, is set during Argentina’s 2001 financial crash, with protesters defying tear gas, from teachers to lorry drivers. It opens in a barrio at the “wolf’s mouth”, where the asphalt and streetlights give out, with two peso-less youths butchering a cat for meat. As they become embroiled in a lethal turf war between drug lords, the narrator, Gringo, probes the mystery of his mother’s disappearance, and that of his cousin—a reformed gangster turned pavement hawker.

Gringo, torn between moral scruples and the need to “look after number one”, learns that there are only two ways to kill a cat: civilised or savage. A police crackdown on the marchers prompts him to retaliate in what he sees as a “seriously civilised fashion”. One of the characters in “An Open Secret” claims bitterly that in Argentina, “the winners make history and the losers write it.” To judge from these novels that scour the past and mourn the future, it seems nobody won.

Spurce: The Economist

La scommessa delle Americhe.

Il futuro dell’America Latina.

«La scommessa delle Americhe. Viaggio nel futuro dell’America Latina: bandiere rosse, bandiere rosa» 2007
di Maurizio Chierici

La scommessa delle Americhe. Viaggio nel futuro dell’America Latina: bandiere rosse, bandiere rosa

Maurizio Chierici (Author)

La scommessa delle Americhe. Viaggio nel futuro dell'America Latina: bandiere rosse, bandiere rosa
In America Latina sembra finito il sonno tormentato dagli incubi. Dopo le elezioni del 2006 le bandiere sono cambiate ma l’adolescenza della democrazia non ha sciolto le sue inquietudini. Continua la ricerca di un’identità che è stata definita da elezioni per la prima volta trasparenti: passo importante, ma solo un passo. Il merito è delle società che stanno cambiando: si affacciano nuovi protagonisti e movimenti comunitari, presenze inedite delle quali è ancora impossibile valutare il peso politico perché l’assenza degli Stati Uniti, distratti dalla dottrina Bush, non permette di individuare il futuro con ragionevole approssimazione.Quel sonno tormentato dagli incubi sembra finito. L’America Latina si sveglia e volta pagina. Dopo le elezioni del 2006 le bandiere sono cambiate ma l’adolescenza della democrazia non ha sciolto le sue inquietudini. Confermano le tendenze i paesi dai governi consolidati a destra e a sinistra – Brasile, Venezuela e Colombia -, mentre la realtà resta incerta in Ecuador e in Nicaragua. Messico e Perù sono in bilico tra immobilità ed evoluzione: annuncia instabilità la differenza impalpabile dei voti, che risentono dello sfinimento delle forze al potere. La destra messicana è condizionata dalle tragedie sociali che il neoliberismo continua ad aggravare e il nuovo presidente Calderón ripropone un paese latino ma anche nordamericano, vicino agli Stati Uniti nel barocco della cultura spagnola; doppio profilo tra convenienze che non sempre coincidono e i problemi che continuano. Il ritorno in Perù di Alan Garcìa tradisce le ambiguità che lo hanno costretto all’esilio; rieccolo con le promesse – fragili, fuori tempo – di una socialdemocrazia ispirata ai fallimenti dei suoi anni Ottanta. Intanto continua la ricerca di un’identità che è stata definita da elezioni per la prima volta trasparenti: passo importante, ma solo un passo. Il merito è delle società che stanno cambiando: si affacciano nuovi protagonisti e movimenti comunitari, presenze inedite delle quali è ancora impossibile valutare il peso politico perché l’assenza degli Stati Uniti, distratti dalla dottrina Bush, non permette di individuare il futuro con ragionevole approssimazione. Se tornano, cosa succede? L’ottimismo dello scrittore uruguayano Jorge Majfud, molto amato e premiato negli Stati Uniti dove insegna Letteratura spagnola all’Università della Georgia, alleggerisce la contrapposizione, ricordando l’ammirazione per gli Stati Uniti, nazione dove trovavano rifugio gli animatori del risorgimento antispagnolo. Nel 1897 la colonia stava svanendo e il sentimento per la «patria umiliata» si aggrappava all’esempio della democrazia di Washington, ma il Novecento rovescia gli umori: i Latini dimenticano le sofferenze dell’impero di Madrid e riscoprono «l’ispanità», pur rifiutando il conservatorismo autoritario franchista, mentre gli intellettuali diffidano ma non diffidano i governanti e la Chiesa ufficiale. La delusione dell’essere passati dalla vecchia colonia alla colonia ricomposta nell’«impero americano» riaccende la rivolta, che nel giudizio di Majfud è destinata a spegnersi: «Il XXI secolo risolverà il tragico conflitto tra l’antica democrazia rappresentativa, che tutela gli interessi delle classi e delle nazioni, e la nascente democrazia diretta, effetto della radicalizzazione, conseguenza di emarginazioni lasciate degenerare e ormai organizzate in strutture interculturali. A metà del nostro secolo la superpotenza sparirà, lasciando posto a contenitori geopolitici nei quali progressivamente confluiranno popoli e nuovi protagonisti. Ciò porterà a una diminuzione degli squilibri sociali, quindi delle incomprensioni che dividono le nazioni. Nell’America Latina unita cambieranno i sentimenti ostili verso gli Stati Uniti a partire dal 2030».

Bill O’Reilly ‘Killing Lincoln’ Errors: Book Contains Plethora Of Factual Inaccuracies

Bill Oreilly Killing Lincoln

The Huffington Post    First Posted: 11/13/11 02:28 PM ET Updated: 11/15/11 07:57 PM ET

Bill O’Reilly is no stranger to controversy. This time, though, his new book is the focus of intense criticism.

As Salon’s Justin Elliott first reported, «Killing Lincoln», which he co-authored with Martin Dugard, is riddled with factual inaccuracies. The National Park Service outed the mistakes in a recent review and recommended that Ford’s Theater bookstores not sell the book. One of the bookstores banned, while the other continues to sell it.

In one instance, the book claims Ford’s Theatre was burned down in 1863 when it was actually destroyed in the end of 1862. The book contains multiple references to Lincoln in the Oval Office, which wasn’t built until decades after his death. It also includes the line «He furls his brow»; furl is a nautical term, the correct word is furrows.

Despite being second on the New York Times’ bestseller list, «Killing Lincoln» has taken heat from a slew of critics. Christian Science Monitor’s Jackie Hogan chastises the book for covering up negative aspects of Lincoln’s presidency in favor of a good story. As she puts it, «style and image often take precedence over evidence and substance.» She also calls the book «sensationalized, suggestive, and overly simplistic.»

Noted historian Eric Foner told the Washington Post that, “I would not be surprised if there were historical errors as [O’Reilly] is better known as a TV polemicist than as a scholar.»

In September, O’Reilly told Fox and Friends that he didn’t want to write just another «boring history book.» Mission accomplished, then.

[fuente: http://www.huffingtonpost.com]

Bill O’Reilly’s ‘Killing Lincoln’ not for sale at Ford’s Theatre museum bookstore

By , Published: November 12

Of all the places you’d expect to find Bill O’Reilly’s “Killing Lincoln: The Shocking Assassination That Changed America Forever,” Ford’s Theatre, the site of the dreadful act, should rank at the top. But you’d do better to search for the history bestseller on ­Amazon.com, because you won’t find it at the theater’s museum bookstore.For a history of the assassination — an “unsanitized and uncompromising . . . no spin American story,” as O’Reilly and co­author Martin Dugard put it, “Killing Lincoln” suffers from factual errors and a lack of documentation, according to a study conducted by Rae Emerson, the deputy superintendent of Ford’s Theatre National Historic Site, which is a unit of the National Park Service. Emerson’s review recommended that the book not be sold at Ford Theatre’s NPS store.

(Henry Holt & Co.) – \»Killing Lincoln: The Shocking Assassination that Changed America Forever\» by Bill O’Reilly & Martin Dugard.

While the National Park Service does not carry “Killing Lincoln” in the theater’s basement museum bookstore, Ford’s Theatre Society, which operates Ford’s Theatre in partnership with the park service, sells the book in its gift shop located in the ground-floor lobby of the theater. “We decided several weeks ago to carry Bill O’Reilly’s book ‘Killing Lincoln’ in the Ford’s Theatre Society gift shop,” said Paul R. Tetreault, director of Ford’s Theatre Society. “While we understand the National Park Service’s concerns about the book, we decided to let our visitors judge the book themselves.”Henry Holt, the publisher of “Killing Lincoln,” said it was not able to provide comment. O’Reilly did not respond to a request for comment.

Other Lincoln experts also say they have found inaccuracies in the book. In a review published in the November issue of “North & South — The Official Magazine of the Civil War Society,” historian Edward Steers Jr. cites several instances where the book strays from documented history. He then asks: “If the authors made mistakes in names, places, and events, what else did they get wrong? How can the reader rely on anything that appears in ‘Killing Lincoln’?”

By taking on Lincoln, O’Reilly and Dugard have set themselves up for avid scrutiny. Few presidents, indeed few subjects, are as voluminously researched and fought over as Lincoln. Steers notes that more than 16,000 books and articles have been written about Lincoln, with more than 125 volumes on the assassination. He adds that only eight of the assassination books were written by professional historians.

Eric Foner, a history professor at Columbia University who has written about the Civil War, Lincoln and the South for 40 years, said that he had not read “Killing Lincoln,” but added in an e-mail, “Many people outside the academy have written about Lincoln and the assassination, but all sorts of unproven theories about it abound and one would hope that any writer would make use of all the relevant sources (and avoid historical errors).”

“Killing Lincoln” has no footnotes. An afterword on sources lists “books, websites, and other archived information.” But to Steers, the list leaves out important primary documents.

Light Speed May Have Been Exceeded By Subatomic Particle

Light cone cs

Light cone cs

CERN: Light Speed May Have Been Exceeded By Subatomic Particle

GENEVA — One of the very pillars of physics and Einstein’s theory of relativity – that nothing can go faster than the speed of light – was rocked Thursday by new findings from one of the world’s foremost laboratories.

European researchers said they clocked an oddball type of subatomic particle called a neutrino going faster than the 186,282 miles per second that has long been considered the cosmic speed limit.

The claim was met with skepticism, with one outside physicist calling it the equivalent of saying you have a flying carpet. In fact, the researchers themselves are not ready to proclaim a discovery and are asking other physicists to independently try to verify their findings.

«The feeling that most people have is this can’t be right, this can’t be real,» said James Gillies, a spokesman for the European Organization for Nuclear Research, or CERN, which provided the particle accelerator that sent neutrinos on their breakneck 454-mile trip underground from Geneva to Italy.

Going faster than light is something that is just not supposed to happen according to Einstein’s 1905 special theory of relativity – the one made famous by the equation E equals mc2. But no one is rushing out to rewrite the science books just yet.

It is «a revolutionary discovery if confirmed,» said Indiana University theoretical physicist Alan Kostelecky, who has worked on this concept for a quarter of a century.

Stephen Parke, who is head theoretician at the Fermilab near Chicago and was not part of the research, said: «It’s a shock. It’s going to cause us problems, no doubt about that – if it’s true.»

Even if these results are confirmed, they won’t change at all the way we live or the way the world works. After all, these particles have presumably been speed demons for billions of years. But the finding will fundamentally alter our understanding of how the universe operates, physicists said.

Einstein’s special relativity theory, which says that energy equals mass times the speed of light squared, underlies «pretty much everything in modern physics,» said John Ellis, a theoretical physicist at CERN who was not involved in the experiment. «It has worked perfectly up until now.»

France’s National Institute for Nuclear and Particle Physics Research collaborated with Italy’s Gran Sasso National Laboratory on the experiment at CERN.

CERN reported that a neutrino beam fired from a particle accelerator near Geneva to a lab 454 miles (730 kilometers) away in Italy traveled 60 nanoseconds faster than the speed of light. Scientists calculated the margin of error at just 10 nanoseconds. (A nanosecond is one-billionth of a second.)

Given the enormous implications of the find, the researchers spent months checking and rechecking their results to make sure there were no flaws in the experiment.

A team at Fermilab had similar faster-than-light results in 2007, but a large margin of error undercut its scientific significance.

If anything is going to throw a cosmic twist into Einstein’s theories, it’s not surprising that it’s the strange particles known as neutrinos. These are odd slivers of an atom that have confounded physicists for about 80 years.

The neutrino has almost no mass, comes in three different «flavors,» may have its own antiparticle and has been seen shifting from one flavor to another while shooting out from our sun, said physicist Phillip Schewe, communications director at the Joint Quantum Institute in Maryland.

Columbia University physicist Brian Greene, author of the book «Fabric of the Cosmos,» said neutrinos theoretically can travel at different speeds depending on how much energy they have. And some mysterious particles whose existence is still only theorized could be similarly speedy, he said.

Fermilab team spokeswoman Jenny Thomas, a physics professor at the University College of London, said there must be a «more mundane explanation» for the European findings. She said Fermilab’s experience showed how hard it is to measure accurately the distance, time and angles required for such a claim.

Nevertheless, Fermilab, which shoots neutrinos from Chicago to Minnesota, has already begun working to try to verify or knock down the new findings.

And that’s exactly what the team in Geneva wants.

Gillies told The Associated Press that the readings have so astounded researchers that «they are inviting the broader physics community to look at what they’ve done and really scrutinize it in great detail, and ideally for someone elsewhere in the world to repeat the measurements.»

Only two labs elsewhere in the world can try to replicate the work: Fermilab and a Japanese installation that has been slowed by the tsunami and earthquake. And Fermilab’s measuring systems aren’t nearly as precise as the Europeans’ and won’t be upgraded for a while, said Fermilab scientist Rob Plunkett.

Drew Baden, chairman of the physics department at the University of Maryland, said it is far more likely that the CERN findings are the result of measurement errors or some kind of fluke. Tracking neutrinos is very difficult, he said.

«This is ridiculous what they’re putting out,» Baden said. «Until this is verified by another group, it’s flying carpets. It’s cool, but …»

So if the neutrinos are pulling this fast one on Einstein, how can it happen?

Parke said there could be a cosmic shortcut through another dimension – physics theory is full of unseen dimensions – that allows the neutrinos to beat the speed of light.

Indiana’s Kostelecky theorizes that there are situations when the background is different in the universe, not perfectly symmetrical as Einstein says. Those changes in background may alter both the speed of light and the speed of neutrinos.

But that doesn’t mean Einstein’s theory is ready for the trash heap, he said.

«I don’t think you’re going to ever kill Einstein’s theory. You can’t. It works,» Kostelecky said. There are just times when an additional explanation is needed, he said.

If the European findings are correct, «this would change the idea of how the universe is put together,» Columbia’s Greene said. But he added: «I would bet just about everything I hold dear that this won’t hold up to scrutiny.»

(source>>)

la película más triste

‘Campeón’ es la película más triste

Un estudio científico determina que el filme permite descubrir emociones en las personas.- El filme de Rob Reiner ‘Cuando Harry encontró a Sally’ (1989), la más divertida de todos los tiempos

Billy Flynn (Jon Voight) es un alcoholizado exboxeador que vive en un hipódromo junto a su hijo (Rick Schroder). Un día, tras reencontrarse con la madre del chaval, decide volver al ring y probar su valía ante su vástago. En su último combate Flynn cae destrozado por su oponente y, tras llamar agonizante a su pequeño, muere. «Campeón, ¡despierta! No duermas ahora. ¡Tienes que ir a casa!. Es la secuencia que convierte a Campeón, de Franco Zeffirelli (1979), como la película más triste de la historia. Así ha concluido una investigación de la Universidad de California, divulgada recientemente por la revista del museo Smithsonian.

El estudio, realizado por James J. Gross y Robert W. Levenson, revela que la secuencia final de Campeónse ha convertido en una pieza clave en los laboratorios de psicología del mundo para determinar si una persona deprimida es más propensa a llorar que una que no lo está, e incluso para detectar si una que está triste tiende a gastar más dinero. A través de la imagen también se puede determinar si las personas mayores son más sensibles al dolor que los jóvenes. «Todavía me siento triste cuando veo a ese niño llorar con todo su corazón», dice Gross, citado por la publicación californiana. El momento cumbre de la película dura 2 minutos con 51 segundos.

El drama, estrenado en 1979 y con la que Schroder, con solo 9 años, ganó un Globo de Oro a mejor actor revelación, es capaz de producir en el espectador una tristeza profunda que otras secuencias infantiles como Kramer contra Kramer (Robert Benton, 1979) o la muerte de la madre del tierno ciervo protagonista de Bambi, del clásico Disney de 1942.

La investigación científica se remonta a 1988. Robert W. Levenson, profesor de psicología en la Universidad de California, y su estudiante graduado, James Gross, ahora profesor de la Universidad de Stanford, pidieron recomendaciones de películas a expertos y críticos de cines, así como a sus propios colegas. La idea, según explica la revista californiana, era identificar los momentos de filmes capaces de provocar reacciones emocionales en las personas y a partir de ello, desarrollar un catálogo que sirviese de instrumento en los laboratorios psicológicos.

La película más divertida

Durante 20 años de experimentación y evaluación de más de 250 películas y entrevistas a casi 500 personas, la investigación también desvela que la secuencia del orgasmo fingido por Meg Ryan enCuando Harry encontró a Sally (Rob Reiner, 1989) es la más divertida de la historia. El Resplandor de Stanley Kubrick (1980) protagonizado por Jack Nicholson encarnando al esquizofrénico Jack Torrence. Le sigue El silencio de los corderos, de Jonathan Demmen, 1991.

De las 250 películas evaluadas, solo 78 fueron seleccionadas. De ellas, 16 filmes fueron los que provocaron emociones contundentes en los espectadores. «Algunas secuencias de la película fueron rechazadas debido a que obtuvieron una mezcla de emociones. Se detectaron momentos que provocaban ira y tristeza en fragmentos donde se apreciaban momentos de injusticia», según explica la revista. Aunque en un inicio se creyó que la investigación ser realizaría en corto tiempo, al final se tomó años. «Todo el mundo pensó que era fácil», afirma Levenson, citado por la publicación estadounidense.

[Fuente: El Pais de Madrid]

Borges en Nueva York

Jorge Luis Borges, Beatriz Guido y Marta lynch

Jorge Luis Borges, Beatriz Guido y Marta lynch

Borges en el corazón

«Ahora, todo el mundo está en mi interior», decía el escritor cuando la ceguera le iba permitiendo aislarse paulatinamente de las interferencias del mundo. A los 25 años de su muerte, el gran cronista estadounidense Gay Talese rememora la entrevista en la que lo conoció en Nueva York

Lo que sigue es la reproducción del relato que escribí de mi única entrevista con Borges, que tenía entonces 62 años (y su madre, de 85), que llevamos a cabo en un hotel de Nueva York (creo que era el Algonquin, en la Calle 44 Oeste) y se publicó en The New York Times el 31 de enero de 1962. En aquella época, yo tenía 30 años y era redactor delTimes; aquel día mi redactor jefe me ordenó que fuera a entrevistar a Borges, cuya obra conocía por supuesto; me sentí ligeramente nervioso ante la perspectiva de conocer a la gran figura literaria en persona.

Lo primero que me impresionó fue su aparente estado de alerta, sentado muy recto en una silla tapizada de respaldo alto

Junto a él se sentaba su madre, que, a pesar de tener 85 años, no aparentaba más de 60 y que era de una belleza asombrosa

Nos encontramos en el vestíbulo del hotel, a la hora acordada, y, aunque yo sabía que era ciego, lo primero que me impresionó fue su aparente estado de alerta, la impresión que daba de enterarse de todo, sentado muy recto en una silla tapizada de respaldo alto, desde donde parecía observar las idas y venidas de docenas de huéspedes que recorrían el ruidoso vestíbulo. Junto a él se sentaba su madre, que, a pesar de tener 85 años, no aparentaba más de 60 y que, podría añadir, era de una belleza asombrosa para tener cualquier edad. Pensé que no podía haber sido más bella ni cuando tenía 25 años; porque, a los 85, irradiaba una vitalidad y una energía intemporales, y la suave piel de su rostro era la de una mujer bien conservada que (no me cabía la menor duda) debía de dedicarse a diario a mantener su atractivo; seguro que pasaba horas delante de un espejo con el fin de satisfacer su deseo de representar la perfección para todas las personas con las que se encontrase. Durante la entrevista que hice a su hijo, no pude evitar mirarla mientras nos escuchaba y, a veces, introducía alguna palabra para subrayar lo que estaba diciendo él.

La entrevista no duró más de media hora; he aquí, reproducido, el artículo que escribí en aquella memorable ocasión, en 1962, cuando conocí a Borges y a su inolvidable madre.

Como su padre y su abuelo, su bisabuelo y su tatarabuelo, Jorge Luis Borges se ha quedado poco a poco ciego. Pero hasta la ceguera, dice, tiene ventajas.

«Antes, el mundo exterior interfería demasiado», me decía este intelectual argentino de 62 años ayer en Nueva York. «Ahora, todo el mundo está en mi interior. Y veo mejor, porque puedo ver todas las cosas que sueño. Fue una ceguera gradual, nada trágica», continuó. «Si uno se queda ciego de pronto, el mundo se le hace añicos. Pero si primero pasa por un crepúsculo, el tiempo fluye de manera diferente. No es preciso hacer nada. Uno puede quedarse sentado. Las personas ciegas tienen mucha dulzura. Las sordas, en cambio, no. Las personas sordas son muy impacientes. A veces, la gente se ríe de los sordos. Nadie se ríe de un ciego».

«El jueves», dijo el doctor Borges, «doy una conferencia en… ¿En? ¿Cómo se llama ese sitio?».

«Yale», dijo su madre.

«Eso es, Yale», siguió él. «Voy a hablar sobre William Henry Hudson, un escritor inglés nacido en Argentina. Y el 6 de febrero, estaré en Harvard. El 12 de febrero, en la Universidad de Columbia. Y el 14 de febrero, en Princeton. Hablaré de clásicos argentinos como el magnífico poema Martín Fierro, que trata de un gaucho y fue escrito en 1872 por Hernández. El gaucho es un personaje realista pero poco romántico; también presentaré al otro gran poeta argentino, Lugones, que tradujo a Homero al español».

Durante toda su gira de conferencias, el doctor Borges contará con la ayuda de una memoria extraordinaria, casi absoluta -otra consecuencia de la ceguera-, y de su madre, que, a sus 85 años, parece tan dinámica y se conserva tan bien como una de esas atractivas mujeres de 60 años dadas al narcisismo, algo que no parece ser el caso de la señora Borges. La madre de Borges, como su hijo, pasó la mayor parte de sus años prerrevolucionarios en Buenos Aires luchando contra Juan Perón, y en una ocasión pasó una semana en la cárcel por participar en una manifestación contra él.

«Los escritores sufrieron mucho con el dictador», asegura el doctor Borges, aunque igual de mala era la situación en Argentina hace 30 años, «cuando nos leíamos las obras y nos lavábamos la ropa unos a otros». Pero hoy los escritores han progresado, y en especial él. Es autor de 30 libros de ensayo, poesía y relato, y su primera recopilación traducida al inglés saldrá publicada esta primavera en New Directions, bajo el título Labyrinth.

«No creo que Perón supiera que había literatura en su país», opina el doctor Borges. «Nos puso todos los obstáculos posibles, pero lo que más le importaba, en realidad, era agitar a todo el mundo en contra de Estados Unidos y mandar a la gente a la cárcel».

Aunque el doctor Borges no puede adivinar las consecuencias a largo plazo de la última reunión de la Organización de Estados Americanos en Punta del Este, Uruguay, dice que, «por desgracia», Fidel Castro parece afianzado, y «los comunistas son muy listos».

«Los estadounidenses son siempre unos incomprendidos», añade. «Si dan dinero, la gente piensa que es un soborno. Si no lo dan…», reflexiona, «quizá sea mejor».

La madre del doctor Borges miró su reloj y le recordó que tenían una cita en otro lugar unos minutos después. Me puse de pie, les di la mano a los dos y les agradecí que me hubieran dedicado su tiempo. Volví corriendo al edificio de The New York Times, que estaba a solo dos manzanas, con la esperanza de escribir algo que hiciera justicia al rato que había pasado con aquel extraordinario hombre de letras y su madre. También pensé en lo que había dicho sobre las personas ciegas, sobre todo esta frase inolvidable: «Ahora, todo el mundo está en mi interior… Y veo mejor, porque puedo ver todas las cosas que sueño».

Traducción de María Luisa Rodríguez Tapia. Gay Talese (Ocean City, Nueva Jersey, 1932) ha publicado recientemente en España Honrarás a tu padre (traducción de Patricia Torres Londoño. Alfaguara. Madrid, 2011. 640 páginas. 21.50 euros) y el año pasado Retratos y encuentros (Alfaguara) y La mujer de tu prójimo (Debate).

[Fuente: diario El Pais, de Madrid]

Bad Predictions about the Future

Top 87 Bad Predictions about the Future

Events

 

  • «We will bury you.»
    Nikita Krushchev, Soviet Premier, predicting Soviet communism will win over U.S. capitalism, 1958.
  • «Everything that can be invented has been invented
    Charles H. Duell, an official at the US patent office, 1899.
  • «I see no good reasons why the views given in this volume should shock the religious sensibilities of anyone.»
    Charles Darwin, in the foreword to his book, The Origin of Species, 1869.
  • «Stocks have reached what looks like a permanently high plateau.»
    Irving Fisher, economics professor at Yale University, 1929.
  • «If anything remains more or less unchanged, it will be the role of women
    David Riesman, conservative American social scientist, 1967.
  • «It will be gone by June.»
    Variety, passing judgement on rock ‘n roll in 1955.
  • «Democracy will be dead by 1950
    John Langdon-Davies, A Short History of The Future, 1936.
  • «A short-lived satirical pulp.»
    TIME, writing off Mad magazine in 1956.
  • «And for the tourist who really wants to get away from it all, safaris in Vietnam»
    Newsweek, predicting popular holidays for the late 1960s.
  • «Four or five frigates will do the business without any military force.» -– British prime minister Lord North, on dealing with the rebellious American colonies, 1774.
  • «In all likelihood world inflation is over.»
    International Monetary Fund Ceo, 1959.
  • «This antitrust thing will blow over.»
    Bill Gates, founder of Microsoft.
  • «Remote shopping, while entirely feasible, will flop – because women like to get out of the house, like to handle merchandise, like to be able to change their minds.»
    TIME, 1966, in one sentence writing off e-commerce long before anyone had ever heard of it.
  • «They couldn’t hit an elephant at this dist-»
    Last words of Gen. John Sedgwick, spoken as he looked out over the parapet at enemy lines during the Battle of Spotsylvania in 1864.
  • «Our country has deliberately undertaken a great social and economic experiment, noble in motive and far reaching in purpose.» -– Herbert Hoover, on Prohibition, 1928.
  • «It will be years – not in my time – before a woman will become Prime Minister
    Margaret Thatcher, future Prime Minister, October 26th, 1969.
  • «Read my lips: NO NEW TAXES
    George Bush, 1988.
  • «You will be home before the leaves have fallen from the trees.» -– Kaiser Wilhelm, to the German troops, August 1914.
  • «This is the second time in our history that there has come back from Germany to Downing Street peace with honor. I believe it is peace for our time.» -– Neville Chamberlain, British Prime Minister, September 30th, 1938.
  • «That virus is a pussycat.» -– Dr. Peter Duesberg, molecular-biology professor at U.C. Berkeley, on HIV, 1988.
  • «The case is a loser.» -– Johnnie Cochran, on soon-to-be client O.J.’s chances of winning, 1994.
  • «Reagan doesn’t have that presidential look.» -– United Artists Executive, rejecting Reagan as lead in 1964 film The Best Man.
  • «Capitalist production begets, with the inexorability of a law of nature, its own negation.»
    Karl Marx.
  • «Sensible and responsible women do not want to vote
    Grover Cleveland, U.S. President, 1905.
  • «Man will not fly for 50 years
    Wilbur Wright, American aviation pioneer, to brother Orville, after a disappointing flying experiment, 1901 (their first successful flight was in 1903).
  • «I am tired of all this sort of thing called science here… We have spent millions in that sort of thing for the last few years, and it is time it should be stopped.»
    Simon Cameron, U.S. Senator, on the Smithsonian Institute, 1901.
  • «The Americans are good about making fancy cars and refrigerators, but that doesn’t mean they are any good at making aircraft. They are bluffing. They are excellent at bluffing.»
    Hermann Goering, Commander-in-Chief of the Luftwaffe, 1942.
  • «With over fifteen types of foreign cars already on sale here, the Japanese auto industry isn’t likely to carve out a big share of the market for itself.»
    Business Week, August 2, 1968.
  • «The multitude of books is a great evil. There is no limit to this fever for writing; every one must be an author; some out of vanity, to acquire celebrity and raise up a name, others for the sake of mere gain.»
    Martin Luther, German Reformation leader, Table Talk, 1530s(?).
  • «Ours has been the first [expedition], and doubtless to be the last, to visit this profitless locality.»
    Lt. Joseph Ives, after visiting the Grand Canyon in 1861.
  • «There is no doubt that the regime of Saddam Hussein possesses weapons of mass destruction. As this operation continues, those weapons will be identified, found, along with the people who have produced them and who guard them.»
    General Tommy Franks, March 22nd, 2003.Light Bulb

  • «… good enough for our transatlantic friends … but unworthy of the attention of practical or scientific men.»
    British Parliamentary Committee, referring to Edison’s light bulb, 1878.
  • «Such startling announcements as these should be deprecated as being unworthy of science and mischievous to its true progress.»
    Sir William Siemens, on Edison’s light bulb, 1880.
  • «Everyone acquainted with the subject will recognize it as a conspicuous failure
    Henry Morton, president of the Stevens Institute of Technology, on Edison’s light bulb, 1880.Automobiles

  • «The horse is here to stay but the automobile is only a novelty, a fad.»
    The president of the Michigan Savings Bank advising Henry Ford’s lawyer not to invest in the Ford Motor Co., 1903.
  • «That the automobile has practically reached the limit of its development is suggested by the fact that during the past year no improvements of a radical nature have been introduced.»
    Scientific American, Jan. 2 edition, 1909.
  • «The ordinary «horseless carriage» is at present a luxury for the wealthy; and although its price will probably fall in the future, it will never, of course, come into as common use as the bicycle.»
    Literary Digest, 1899.Airplanes

  • «Flight by machines heavier than air is unpractical (sic) andinsignificant, if not utterly impossible.» – Simon Newcomb; The Wright Brothers flew at Kittyhawk 18 months later. Newcomb was not impressed.
  • «Heavier-than-air flying machines are impossible
    Lord Kelvin, British mathematician and physicist, president of the British Royal Society, 1895.
  • «It is apparent to me that the possibilities of the aeroplane, which two or three years ago were thought to hold the solution to the [flying machine] problem, have been exhausted, and that we must turn elsewhere.»
    Thomas Edison, American inventor, 1895.
  • «Airplanes are interesting toys but of no military value
    Marechal Ferdinand Foch, Professor of Strategy, Ecole Superieure de Guerre, 1904.
  • «There will never be a bigger plane built.»
    A Boeing engineer, after the first flight of the 247, a twin engine plane that holds ten people.Computers

  • «Where a calculator on the ENIAC is equipped with 18,000 vacuum tubes and weighs 30 tons, computers in the future may have only 1,000 vacuum tubes and weigh only 1.5 tons
    Popular Mechanics, March 1949.
  • «There is no reason anyone would want a computer in their home.»
    Ken Olson, president, chairman and founder of Digital Equipment Corp. (DEC), maker of big business mainframe computers, arguing against the PC in 1977.
  • «I have traveled the length and breadth of this country and talked with the best people, and I can assure you that data processing is a fad that won’t last out the year.»
    The editor in charge of business books for Prentice Hall, 1957.
  • «But what… is it good for?»
    IBM executive Robert Lloyd, speaking in 1968 microprocessor, the heart of today’s computers.Radio

  • «Radio has no future
    Lord Kelvin, Scottish mathematician and physicist, former president of the Royal Society, 1897.
  • «The wireless music box has no imaginable commercial value. Who would pay for a message sent to no one in particular
    Associates of David Sarnoff responding to the latter’s call for investment in the radio in 1921.
  • «Lee DeForest has said in many newspapers and over his signature that it would be possible to transmit the human voice across the Atlantic before many years. Based on these absurd and deliberately misleading statements, the misguided public … has been persuaded to purchase stock in his company …»
    a U.S. District Attorney, prosecuting American inventor Lee DeForest for selling stock fraudulently through the mail for his Radio Telephone Company in 1913.Space Travel

  • «There is practically no chance communications space satellites will be used to provide better telephone, telegraph, television, or radio service inside the United States.»
    T. Craven, FCC Commissioner, in 1961 (the first commercial communications satellite went into service in 1965).
  • «Space travel is utter bilge.»
    Richard Van Der Riet Woolley, upon assuming the post of Astronomer Royal in 1956.
  • «Space travel is bunk.»
    Sir Harold Spencer Jones, Astronomer Royal of the UK, 1957 (two weeks later Sputnik orbited the Earth).
  • «To place a man in a multi-stage rocket and project him into the controlling gravitational field of the moon where the passengers can make scientific observations, perhaps land alive, and then return to earth – all that constitutes a wild dream worthy of Jules Verne. I am bold enough to say that such aman-made voyage will never occur regardless of all future advances.»
    Lee DeForest, American radio pioneer and inventor of the vacuum tube, in 1926Rockets

  • «We stand on the threshold of rocket mail.» -– U.S. postmaster general Arthur Summerfield, in 1959.
  • «… too far-fetched to be considered.»
    Editor of Scientific American, in a letter to Robert Goddard about Goddard’s idea of a rocket-accelerated airplane bomb, 1940 (German V2 missiles came down on London 3 years later).
  • «A rocket will never be able to leave the Earth’s atmosphere.»
    New York Times, 1936.Atomic and Nuclear Power
  • «The basic questions of design, material and shielding, in combining a nuclear reactor with a home boiler and cooling unit, no longer are problems… The system would heat and cool a home, provide unlimited household hot water, and melt the snow from sidewalks and driveways. All that could be done for six years on a single charge of fissionable material costing about $300.» –- Robert Ferry, executive of the U.S. Institute of Boiler and Radiator Manufacturers, 1955.
  • «Nuclear-powered vacuum cleaners will probably be a reality in 10 years.» -– Alex Lewyt, president of vacuum cleaner company Lewyt Corp., in the New York Times in 1955.
  • «That is the biggest fool thing we have ever done [research on]… The bomb will never go off, and I speak as an expert in explosives.»
    Admiral William D. Leahy, U.S. Admiral working in the U.S. Atomic Bomb Project, advising President Truman on atomic weaponry, 1944.
  • «Atomic energy might be as good as our present-day explosives, but it isunlikely to produce anything very much more dangerous
    Winston Churchill, British Prime Minister, 1939.
  • «The energy produced by the breaking down of the atom is a very poor kind of thing. Anyone who expects a source of power from the transformation of these atoms is talking moonshine.»
    Ernest Rutherford, shortly after splitting the atom for the first time.
  • «There is not the slightest indication that nuclear energy will ever be obtainable. It would mean that the atom would have to be shattered at will.»
    Albert Einstein, 1932.
  • «There is no likelihood man can ever tap the power of the atom.»
    Robert Millikan, American physicist and Nobel Prize winner, 1923.Films

  • «Who the hell wants to hear actors talk
    H. M. Warner, co-founder of Warner Brothers, 1927.
  • «The cinema is little more than a fad. It’s canned drama. What audiences really want to see is flesh and blood on the stage.» -– Charlie Chaplin, actor, producer, director, and studio founder, 1916.Telephone/Telegraph
  • «This ‘telephone’ has too many shortcomings to be seriously considered as a means of communication. The device is inherently of no value to us
    A memo at Western Union, 1878 (or 1876).
  • «The Americans have need of the telephone, but we do not. We have plenty of messenger boys
    Sir William Preece, Chief Engineer, British Post Office, 1878.
  • «It’s a great invention but who would want to use it anyway?»
    Rutherford B. Hayes, U.S. President, after a demonstration of Alexander Bell’s telephone, 1876.
  • «A man has been arrested in New York for attempting to extort funds from ignorant andsuperstitious people by exhibiting a device which he says will convey the human voice any distance over metallic wires so that it will be heard by the listener at the other end. He calls this instrument a telephone. Well-informed people know that it is impossible to transmit the human voice over wires.»
    News item in a New York newspaper, 1868.Television

  • «Television won’t last. It’s a flash in the pan.»
    Mary Somerville, pioneer of radio educational broadcasts, 1948.
  • «Television won’t last because people will soon get tired of staring at a plywood box every night.»
    Darryl Zanuck, movie producer, 20th Century Fox, 1946.
  • «While theoretically and technically television may be feasible,commercially and financially it is an impossibility, a development of which we need waste little time dreaming.»
    Lee DeForest, American radio pioneer and inventor of the vacuum tube, 1926.Railroads

  • «Dear Mr. President: The canal system of this country is being threatened by a new form of transportation known as ‘railroads’ … As you may well know, Mr. President, ‘railroad’ carriages are pulled at the enormous speed of 15 miles per hour by ‘engines’ which, in addition to endangering life and limb of passengers, roar and snort their way through the countryside, setting fire to crops, scaring the livestock and frightening women and children. The Almighty certainly never intended that people should travel at such breakneck speed
    Martin Van Buren, Governor of New York, 1830(?).
  • «What can be more palpably absurd than the prospect held out of locomotives traveling twice as fast as stagecoaches?»
    The Quarterly Review, March edition, 1825.
  • «Rail travel at high speed is not possible, because passengers, unable to breathe, would die of asphyxia.»
    Dr Dionysys Larder (1793-1859), professor of Natural Philosophy and Astronomy, University College London.Other Technology

  • «Transmission of documents via telephone wires is possible in principle, but the apparatus required is so expensive that it will never become a practical proposition
    Dennis Gabor, British physicist and author of Inventing the Future, 1962.
  • «[By 1985], machines will be capable of doing any work Man can do
    Herbert A. Simon, of Carnegie Mellon University – considered to be a founder of the field of artificial intelligence – speaking in 1965.
  • «The world potential market for copying machines is 5000 at most.»
    IBM, to the eventual founders of Xerox, saying the photocopier had no market large enough to justify production, 1959.
  • «I must confess that my imagination refuses to see any sort of submarine doing anything but suffocating its crew and floundering at sea.»
    HG Wells, British novelist, in 1901.
  • «X-rays will prove to be a hoax
    Lord Kelvin, President of the Royal Society, 1883.
  • «Very interesting Whittle, my boy, but it will never work
    Cambridge Aeronautics Professor, when shown Frank Whittle’s plan for the jet engine.
  • «The idea that cavalry will be replaced by these iron coaches is absurd. It is little short of treasonous.»
    Comment of Aide-de-camp to Field Marshal Haig, at tank demonstration, 1916.
  • «Caterpillar landships are idiotic and useless. Those officers and men are wasting their time and are not pulling their proper weight in the war.»
    Fourth Lord of the British Admiralty, 1915.
  • «What, sir, would you make a ship sail against the wind and currents by lighting a bonfire under her deck? I pray you, excuse me, I have not the time to listen to such nonsense.»
    Napoleon Bonaparte, when told of Robert Fulton’s steamboat, 1800s.
  • «The phonograph has no commercial value at all.»
    Thomas Edison, American inventor, 1880s.
  • «If I had thought about it, I wouldn’t have done the experiment. The literature was full of examples that said ‘you can’t do this’
    Spencer Silver on the work that led to the unique adhesives for 3-M «Post-It» Notepads.
  • «Fooling around with alternating current is just a waste of time. Nobody will use it, ever.»
    Thomas Edison, American inventor, 1889 (Edison often ridiculed the arguments of competitor George Westinghouse for AC power).
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