Disculpen la molestia, pero en este referéndum del 27 de marzo quisiera recordarle a mis amigos que somos medio millón de uruguayos en el exterior que no podemos votar en ninguna elección desde el exterior. No es sólo que muchos pagamos impuestos ahí, sino que no dejamos de ser uruguayos por vivir en otro país o estar de viaje. Con los criterios de auto victimización que usan algunos, a José Artigas nunca se le hubiese permitido votar por haberse autoexiliado treinta años en Paraguay.
Los descendientes de europeos en Uruguay, en cambio, votan en algunas elecciones europeas sin haber vivido en Europa. 112 países permiten el voto consular o por correo. Uruguay es el único país de toda América del Sur que no permite este derecho.
JM, marzo 2022